El limón, ese cítrico tan versátil en la cocina, también tiene un papel importante en el cuidado de nuestro jardín. Más allá de su sabor refrescante y sus propiedades para el cuerpo humano, las cáscaras de limón esconden un secreto: son un recurso valioso para mejorar la salud de nuestras plantas. ¿Cómo? Aquí te lo contamos.
Repelente natural de insectos
Las cáscaras de limón funcionan como un escudo protector contra abejas, moscas de la fruta y gusanos. Su aroma cítrico ahuyenta a estas plagas, manteniendo tus plantas a salvo. Además, si tienes mascotas que suelen merodear por el jardín, las cáscaras también los alejarán de ciertas áreas.
Nutrientes para el suelo
En lugar de desechar las cáscaras, úsalas para enriquecer el sustrato. ¿Cómo? Puedes seguir este sencillo procedimiento: coloca rodajas de limón o pedazos de cáscaras en una botella grande llena de agua. Deja que repose durante unos días para que se liberen componentes como el potasio y el calcio. Luego, riega tus plantas con este "agua de limón". También puedes rallar las cáscaras y enterrar los pedacitos en el sustrato para agregar nutrientes.
Té de cáscara de limón
Hierve cáscaras de limón en agua durante unos minutos, deja que el líquido se enfríe y úsalo para regar tus plantas. Este té fortalecerá tus plantas, mejorará la absorción de nutrientes y promoverá un crecimiento vigoroso.
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En resumen, no subestimes el poder de las cáscaras de limón en tu jardín. ¡Con estos tips, tus plantas lucirán siempre radiantes!