Muchas veces olvidamos que las paredes más comunes de nuestra casa, aquellas que están decoradas con pintura lavable, también necesitan una limpieza con cierto nivel de regularidad con motivo de mantenerlas en buen estado y crear un ambiente agradable en casa
.¿Por qué es importante limpiar las paredes?
Higiene: Las paredes acumulan polvo, ácaros y otros alérgenos que pueden afectar la salud de las personas, especialmente de aquellas que sufren alergias.
Estética: Las manchas y el polvo opacan el color de las paredes y hacen que la casa se vea descuidada.
Frescura: Una limpieza profunda de las paredes renueva el ambiente y aporta una sensación de limpieza y frescura.
¿Cuándo limpiar las paredes?
Otoño y Primavera: Son las estaciones ideales para realizar esta tarea, ya que las temperaturas son agradables y permiten ventilar las habitaciones mientras se secan las paredes. Ten consideración que lo recomendable es limpiar las paredes una o dos veces al año, dependiendo de la cantidad de polvo que se acumule.
¿Qué materiales necesitas?
- Solución de limpieza: Puedes preparar una solución casera con agua tibia y un chorro de jabón lavavajillas. Si prefieres, también puedes comprar un producto específico para limpiar paredes.
- Mopas o escobas: Te ayudarán a llegar a todas las alturas de la pared.
- Paños de microfibra o toallas: Para limpiar la superficie de la pared.
- Recipiente con agua tibia: Para enjuagar los paños.
- Guantes: Para proteger tus manos.
Pasos para limpiar las paredes:
- Retira el polvo: Pasa una mopa o escoba por toda la superficie de la pared para eliminar el polvo suelto.
- Prueba la pintura: En una zona poco visible, humedece un paño con la solución de limpieza y frota la pared. Si la pintura no se desprende, puedes continuar con la limpieza en general.
- Limpia la pared: Humedece un paño en la solución de limpieza, escurre el exceso de agua y comienza a limpiar la pared de arriba hacia abajo. Cambia el agua y el paño con frecuencia para mantenerlos limpios.
- Seca la pared: Abre las puertas y ventanas para que la pared se seque al aire libre. Si es necesario, puedes usar un ventilador para acelerar el proceso.
- Limpia los zócalos: Con la ayuda de una escoba o un plumero, elimina el polvo acumulado en los zócalos. Luego, lImpia con un paño húmedo.
Consejos adicionales:
- Antes de comenzar con la limpieza cubre los muebles con sábanas o plásticos para evitar que se mojen o manchen con la solución de limpieza.
- Trabaja en secciones: Divide la pared en secciones para que la limpieza sea más manejable.
Recuerda:
La limpieza de las paredes es una tarea sencilla que puede mejorar significativamente la estética y la higiene de tu hogar. Con un poco de tiempo y esfuerzo, puedes mantener las paredes de tu casa en perfecto estado. ¡Espero que esta guía te haya sido útil!