Sin saberlo, pero atento al revuelo mediático que se desató, el 8 de enero Dani Alves jugó su último partido con la camiseta de Pumas y solo 12 días después terminó tras la reja por una gravísima acusación.
Lo cierto es que aunque se mostró empeñado en sostener su inocencia, durante la mañana del jueves finalmente el brasileño Dani Alves fue condenado a cuatro años y medio de cárcel por agresión sexual más cinco años de “libertad vigilada”.
Sucede que la Sección 21 de la Audiencia de Barcelona emitió un comunicado en el cual da como probada la violación y sostiene que el ex lateral derecho de Barcelona forzó la voluntad de la víctima mediante el “uso de la violencia”.
Entonces, además de continuar detenido en el Centro Penitenciario Brians 2 de Cataluña sin ningún tipo de privilegios, el ex futbolista de 40 años deberá pagar una indemnización de 150.000 euros por los daños morales y las lesiones causadas a la víctima. Al mismo tiempo, el tribunal le prohibió a Alves mantener contacto con la víctima y le impuso una orden de alejamiento por 9 años y medio.
Cabe mencionar que la defensa de brasileño de extensa carrera futbolística había solicitado a la Justicia la absolución del caso o, a lo sumo, una pena de un año por la responsabilidad civil.
No obstante, el veredicto salió en favor de la víctima, cuya abogada representante, Ester García, había solicitado una pena de 12 años de prisión. En tanto, la Fiscalía había pedido 9 años.
En definitiva, la sentencia condenatoria todavía no está firme y puede ser recurrida por la defensa de Dani Alves, pero mientras tanto la Justicia deberá resolver si le otorga o no la libertad provisional que solicitó su abogada defensora hasta que se conozca el fallo.
La causa
Durante los primeros días de enero una joven de 23 años emitió una denuncia por una ataque sexual que sufrió durante la madrugada del 31 diciembre de 2022 en manos del brasileño en el baño de una famosa discoteca de Barcelona. Ante esto, el jugador negó esas versiones y aseguró que se trató de una relación consensuada.
Pese a que se generó un tremendo escándalo, Dani Alves siguió con su vida como si nada y pocos días más tarde fue detenido y puesto en prisión, ya que la Justicia escuchó a la víctima y tomó el caso muy seriamente ante la gravedad de las acusaciones formuladas.