La Adromischus Cristatus, conocida también como “suculenta de cresta”, es una suculenta famosa por su tallo corto y ramificado que no supera los 10 centímetros de altura. Sus hojas triangulares, dispuestas en forma de roseta, son un verdadero espectáculo. Estas pequeñas hojas carnosas presentan un margen terminal ondulado que las hace destacar entre otras suculentas.
Además, la Adromischus Cristatus también nos sorprende con su floración. Sus largas inflorescencias en espiga pueden sostener hasta 8 flores, con pétalos triangulares y una coloración que va del blanco rojizo al verde grisáceo con bordes rosáceos. ¡Adéntrate en el fascinante mundo de las suculentas con la increíble Adromischus Cristatus!
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Cuidados esenciales
Para que tu Adromischus Cristatus luzca siempre radiante, sigue estos sencillos cuidados:
Iluminación: Ubica la planta en un sitio donde reciba luz solar directa durante al menos 6 horas al día. Prefiere climas cálidos, con temperaturas entre los 19 y 30 grados. Evita exponerla a temperaturas bajo cero, ya que podría morir rápidamente.
Riego: La Adromischus Cristatus no tolera el encharcamiento. Riega espaciadamente durante las épocas de calor intenso y disminuye la frecuencia en invierno. Solo necesita agua cuando las hojas muestran signos de deshidratación.
Reproducción: Esta suculenta se reproduce fácilmente mediante esquejes a partir de sus hojas. Enraízan en un plazo de 2 a 4 semanas, permitiéndote multiplicar esta belleza en poco tiempo.