La Agencia Gubernamental de Control (AGC) clausuró el estadio de River Plate tras el uso masivo de bengalas y fuegos artificiales durante el recibimiento al equipo en el partido de semifinales contra Atlético Mineiro, en el cual el equipo no logró la hazaña y quedó fuera de la Copa Libertadores.
La AGC y la Policía de la Ciudad realizaron una inspección y detectaron pirotecnia en espacios no habilitados y el uso de bengalas en todo el estadio de River, una práctica prohibida por normas de seguridad.
El espectáculo, anunciado como uno de los más destacados en la historia del club, dio la vuelta al mundo en redes sociales, pero las autoridades encontraron elementos de pirotecnia en un baño adaptado para personas con discapacidad y en otras zonas sin supervisión técnica.
¿Qué dice la normativa?
La normativa exige que la pirotecnia se realice exclusivamente fuera del estadio y bajo condiciones de seguridad específicas, supervisadas por personal capacitado. Este protocolo no se cumplió, y la AGC consideró que los incumplimientos representaban un riesgo para los asistentes, justificando así la clausura temporal.
Esta decisión pone a River Plate en una situación complicada para futuros encuentros como local. El club deberá gestionar los trámites necesarios ante la Dirección General de Administración de Infracciones de la Ciudad para levantar la clausura, con la intervención del Ministerio Público Fiscal y una posible sanción por parte de la Conmebol.
River Plate está evaluando los pasos a seguir para cumplir con las normas de seguridad y asegurar la pronta reapertura del estadio.