La Hoya carnosa es una planta suculenta impresionante que hará que tu hogar se vea fabuloso. También conocida como flor de cera, flor de porcelana o flor de nácar, esta planta destaca por sus exóticas flores cerosas.
Originaria de Australia y el sur de China, la suculenta Hoya carnosa pertenece a la familia Asclepiadaceae. Esta planta trepadora tiene hojas de color verde oscuro y pequeñas flores estrelladas en tonos rosados y blancos. Florece desde la primavera hasta el verano, y es bastante fácil de cultivar, aunque requiere ciertos cuidados especiales.
Cuidados especiales
Iluminación: La Hoya carnosa necesita mucha luz para florecer, pero evita los rayos directos del sol. Es perfecta tanto para el exterior como en macetas dentro del hogar, siempre y cuando tenga buena iluminación.
Sustrato: Necesita un suelo rico en nutrientes y con buen drenaje. Es crucial renovar el abono durante la época de floración, que va desde la primavera hasta el verano. La floración puede tardar años, dependiendo de la luz y el suelo.
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Poda: La Hoya carnosa florece desde su “rama floral”. No debes podarla, ya que la planta florecerá al año siguiente desde la misma rama. Si haces esquejes, recuerda que si cortas la rama floral, la futura planta puede tardar en florecer.
Riego: Mantén el sustrato húmedo, especialmente en épocas de calor. En invierno, espacia los riegos y evita las corrientes de aire. La Hoya carnosa puede tolerar heladas suaves en el exterior.
Soporte: Como planta trepadora, es conveniente ubicarla cerca de un muro o preparar un armazón en la maceta para que crezca ordenadamente. También luce espectacular cuando cuelga desde lo alto.
En conclusión, con estos cuidados sencillos, disfrutarás de la belleza y el perfume de la planta Hoya carnosa durante muchos años. ¡Anímate a decorar tu hogar con esta maravilla natural!