El año comenzó a tras mano para Francisco Cerúndolo. El argentino mejor ubicado en el ranking ATP, sumó dos derrotas en igual cantidad de partidos sin siquiera ganar un set. Luego de la segunda derrota, el tenista ubicado en el puesto 22 de la Asociación de Tenistas Profesionales, no ocultó su desazón y encendió las alarmas pensando en el primer Grand Slam del año.
Con el Australian Open a la vuelta de la esquina, Cerúndolo cayó sin atenuantes en el debut del torneo ATP 250 de Auckland, Nueva Zelanda. El verdugo del argentino fue el francés Alexandre Müller, 76° del mundo, quien en apenas 66 de juego se impuso por 6-1 y 6-1 ante la mejor raqueta del país.
La actuación del tenista de 25 años tuvo demasiados puntos negativos. Con tan sólo 47 por ciento de efectividad en el primer servicio, el juego se hizo siempre cuesta arriba. Además, Cerúndolo no pudo mantener en ningún momento su saque siendo los dos puntos que ganó producto de las únicas dos veces que pudo quebrar al francés.
El mal momento y la desazón se vieron reflejadas en el posteo que el tenista realizó en la red social X. “Un desastre, muy mal. No queda otra que ponerle el pecho y seguir intentando” escribió sin anestesia el deportista argentino. Sin embargo, dejó en claro que no piensa darse por vencido a pesar de que fueron varios los periodistas especializados los que definieron a las dos derrotas de Cerúndolo como las dos peores de su carrera.
Con todo listo para la gran cita
Francisco Cerúndolo apunta a cambiar la cara de su juego ni más ni menos que el Abierto de Australia. El argentino, quien sumó en las últimas horas a su grupo de trabajo a Franco Davin, participará por segundo año consecutivo en el primer Grand Slam del año. En su primera experiencia arribó hasta la tercera rueda, donde cayó ante Felix Auger-Aliassime, quien por aquel entonces ocupaba el puesto número 7 del ranking ATP.