Si te gustan los ñoquis, pero a la vez también quieres opción más ligera y saludable, entonces te encantará esta receta de ñoquis soufflé de espinaca, sin papa y sin ricota. Estos ñoquis son suaves, esponjosos y deliciosos, y se preparan con ingredientes simples y nutritivos. Además, son muy fáciles de elaborar y se pueden acompañar con la salsa que más te guste.
La receta de estos ñoquis soufflé de espinaca tienen varios beneficios para tu salud. Por un lado, la Espinaca es un superalimento que aporta vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra. Algunos estudios científicos incluso han mostrado que ayuda a prevenir la anemia, así como también a mejorar el funcionamiento mental, proteger la salud de nuestros huesos y hasta colabora con la regulación del nivel de azúcar en la sangre.
Así que ya te hemos brindado todos los motivos además de su resultado delicioso, para que te animes a juntar esta lista de ingredientes y seguir paso a paso con imágenes de cada momento clave de la receta para que puedas prepararla de forma sencilla y sin errores.
Ingredientes
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 taza de espinacas cocidas (150 gramos)
- 1 huevo
- 250 ml. de leche
- 90 gramos de manteca
- 215 gramos de harina todo uso
- 1/2 cucharadita de polvo para hornear ó levadura química
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- 1/2 cucharadita de pimienta molida
Modo de Preparación
Para dar inicio a la preparación de nuestra receta, agregamos en una sartén una cucharada generosa de aceite de oliva, y el ajo picado fino o cortado en rodajas finas.
Cuando el diente de ajo esté dorado, incorpora la espinaca en la sartén y sal a gusto. Remueve la espinaca y aseguráte que comience a secarse y perder agua.
Retiramos del fuego y pasamos la espinaca a una licuadora o procesadora y agregamos un cuarto de litro de leche, la nuez moscada, pimienta y sal.
Tapamos y licuamos bien hasta obtener una mezcla con una textura similar como la que verás a continuación.
Ahora, volcamos nuestra mezcla recién licuada en una olla e incorporamos allí los 90 gramos de manteca cortada en cubos. Una vez que la manteca se derrita por completo agregamos el harina y el polvo para hornear.
Ahora, a fuego mínimo, solo queda revolver enérgicamente hasta integrar la harina, mientras ésta se cocina y comienza a engordar. Notarás que la masa está lista cuando se despegue sola del fondo de la olla como verás a continuación.
Cuando esto suceda, retira del fuego y deja reposar unos minutos para que pierda temperatura. Mientras tanto, espolvorea en una mesada o mesa de trabajo la harina sobre la mesa y luego apoya allí la masa y cuando la temperatura haya descendido lo suficiente amasa por alrededor de 5 minutos.
Notarás que la masa está lista cuando tenga una textura como esta.
Habiendo hecho casi todo el proceso, es tiempo de estirar sobre una mesada con un palo de amasar, darle a las tiras formas de cilindro amasando con un poco de harina, y finalmente cortar los ñoquis con 1cm de largo cada uno. Puedes pasarlos por tenedor, o cualquier utensilio que tengas con el que puedas darle su tradicional forma.
Ahora bien, Es tiempo de someter a prueba nuestra receta, y para ello, en una olla agregaremos agua y llevaremos a hervir. Cuando el agua rompa el hervor, incorporaremos los ñoquis, y los dejaremos cocinar por unos 3 a 5 minutos hasta que comiencen a flotar por sí solos.
Con una espumadera retiramos y para agregarle el toque mágico a este platillo te proponemos una forma fácil y deliciosa, agrega en una sartén un diente de ajo picado, 40 gramos de manteca, sal y pimienta blanca.
Cuando los ajos se doren agrega los ñoquis escurridos, integra a la mezcla de la sartén, agrega un chorro de crema de leche (nata para montar) y esta deliciosa receta ha quedado finalizada y lista para disfrutarse.