Valeria Mazza, la única supermodelo internacional, es la única modelo de Latinoamérica que ostenta tal categoría. A sus más de 50 años, la icónica diva argentina de las pasarelas y las grandes marcas en el mundo, volvió de lleno a un photoshooting de editorial para la revista VOGUE México
La modelo Valeria Mazza posó en diferentes lugares de Buenos Aires, en los que se incluyó el reconocido mundialmente barrio La Boca. La celebridad es la nueva tapa de Revista VOGUE México y para ello, tuvo más de 10 cambios de vestuarios.
En un amplio despliegue de glamour y de estilo, la modelo, madre de 4 hijos, esposa y empresaria, compartió en su cuenta de Instagram el backstage de la jugada sesión de fotos y un book completo de imágenes.
“Valeria Mazza está de regreso. La icónica argentina que se convirtió en la primera supermodelo latinoamericana vuelve con una serie documental sobre su vida y legado: Valeria Mazza: Un Sueño Dorado”, escribió así la revista.
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Valeria habló con exclusiva con esta prestigiosa supermodelo y les contó cómo vive su actual etapa de vida: “Me siento espléndida en todos los sentidos”.
Entre los secretos que la experimentada modelo contó, estuvo el hecho de que el ser modelo y la fama le llegó por casualidad, pues su idea era ser maestra y ser nadadora profesional e ir a las Olimpiadas.
Valeria Mazza en la flor de su carrera
Ya lo hemos dicho antes y Valeria lo ratifica con esta increíble y audaz sesión de fotos. Los 50 son ahora los nuevos 30. La modelo se muestra como en sus mejores años en los 90. Varias jornadas de grabación, entrevistas y videos que muestran los rincones de la Buenos Aires más nostálgica.
Vestido coloridos, donde el rojo, el fucsia, el amarillo y el azul se roban los honores, pasando por la calidez del blanco y hasta la belleza de la bandera argentina como parte de su selección para este book de fotos que la posicionan como uan de las mujeres más bellas de la actualidad.
Valeria Mazza marcó una generación en la industria de la moda y ahora, a sus 51 años, vuelve como un tsunami a los estudios para quedarse con la tapa de las mejores revistas del mundo, como lo hacía en sus años de oro como supermodelo internacional.