A la hora de decorar nuestro jardín, la naturaleza nos ofrece una gran variedad de plantas y flores con hermosos colores para darle vida a nuestros espacios.
En ese sentido, hoy te vamos a hablar de la Monstera deliciosa, una de las plantas más populares y fáciles de cuidar para los amantes de la jardinería.
La Monstera deliciosa es una planta tropical que se adapta bien al interior de los hogares, siempre que se le proporcionen las condiciones adecuadas.
A continuación, te contamos cinco claves para hacer feliz a tu Monstera deliciosa y consigas disfrutar de su bello color con su cultivo.
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Luz indirecta
Esta planta necesita una buena iluminación, pero no le gusta el sol directo, dado que puede quemar sus hojas. Lo ideal es colocarla cerca de una ventana orientada al este, oeste o norte, donde reciba luz filtrada o tamizada. Si la luz es demasiado escasa, crecerá lentamente y tendrá hojas pequeñas y sin agujeros.
Riego con moderación
La Monstera deliciosa no tolera el exceso de agua. Este puede provocar la pudrición de las raíces y el amarilleo de las hojas. Lo mejor es regarla cuando la superficie de la tierra esté seca al tacto, aproximadamente una vez por semana en verano y cada dos semanas en invierno. Usa agua a temperatura ambiente y evita mojar las hojas.
Fertiliza con regularidad
Al ser una planta de crecimiento rápido que necesita nutrientes para desarrollarse bien. Puedes aplicar un fertilizante líquido equilibrado cada dos semanas durante la primavera y el verano, siguiendo las instrucciones del fabricante. No fertilices en otoño e invierno, cuando entra en reposo.
Capacidad trepadora
Esta planta trepadora que produce raíces aéreas para sujetarse a los árboles en su hábitat natural. En casa, puedes darle un soporte artificial para que pueda crecer verticalmente y mostrar sus hermosas hojas. Puedes usar un tutor de madera, un palo de bambú, una celosía o una estaca con musgo. Asegúrate de que el soporte sea lo suficientemente alto y fuerte para sostener el peso.
Ambiente húmedo
Al tratarse de una planta originaria de las selvas tropicales, donde la humedad es alta. Para imitar estas condiciones, puedes rociar las hojas con agua cada dos o tres días, colocar un humidificador cerca o ponerla sobre un plato con piedras y agua. Evita las corrientes de aire frío o caliente, que pueden dañarla.
Siguiendo estos consejos, podrás hacer feliz a tu Monstera deliciosa y disfrutar de su belleza y exuberancia. Espero que te haya gustado este artículo y te sirva para cuidar mejor de tu planta.