Las plantas medicinales son un recurso natural que puede ayudarnos a prevenir y aliviar diversas dolencias. Sin embargo, no todas las plantas medicinales son conocidas ni aprovechadas por la mayoría de las personas.
Por ello, en el día de hoy te presentamos 5 plantas medicinales poco comunes pero muy beneficiosas para la salud. Te explicamos qué son, para qué sirven y cómo usarlas correctamente.
Perilla (Perilla frutescens)
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La perilla es una planta herbácea originaria de Asia oriental, donde se usa tanto en la cocina como en la medicina tradicional. Entre sus propiedades se destacan las siguientes:
- Tiene efectos antiinflamatorios, antialérgicos, antivirales e inmunomoduladores.
- Ayuda a tratar el asma, la bronquitis, la rinitis alérgica, la depresión, el herpes y la caspa.
- Contiene ácidos grasos omega-3, vitamina C, hierro, calcio y antioxidantes.
Entre los beneficios más destacables que podemos mencionar se encuentran:
- Mejora la función respiratoria y reduce los síntomas de las alergias.
- Favorece el estado de ánimo y combate el estrés.
- Fortalece el sistema inmunológico y previene las infecciones.
- Nutre el cabello y el cuero cabelludo.
- Entre sus formas de uso se pueden mencionar las siguientes:
- Se puede consumir en forma de infusión, aceite o extracto.
- Se puede añadir a ensaladas, sopas, guisos o salsas.
- Se puede aplicar sobre el cabello o el cuero cabelludo.
Hay que tener precaución con su dosis y su toxicidad, ya que puede causar reacciones alérgicas, irritación gástrica o problemas hepáticos.
Chébula o mirobálano (Terminalia chebula)
La chébula o mirobálano es una planta frutal originaria de la India y el sur de Asia, donde se usa en la medicina ayurvédica desde hace más de 3000 años. Entre sus propiedades se destacan las siguientes:
- Tiene efectos laxantes, antibacterianos, antiinflamatorios, antioxidantes y antidiabéticos.
- Ayuda a tratar el estreñimiento, las infecciones, las úlceras, el colesterol alto, la diabetes, el cáncer y el estrés.
- Contiene taninos, ácidos orgánicos, flavonoides, terpenoides y vitaminas.
Entre sus beneficios se encuentran los siguientes:
- Favorece el tránsito intestinal y previene el estreñimiento crónico.
- Combate las bacterias que causan infecciones gastrointestinales, respiratorias y urinarias.
- Protege la mucosa gástrica y cicatriza las úlceras pépticas.
- Reduce los niveles de colesterol y glucosa en sangre y previene las complicaciones cardiovasculares y renales de la diabetes.
- Inhibe el crecimiento de células cancerosas y potencia los efectos de la radioterapia.
- Alivia el estrés y mejora la memoria y la concentración.
Entre sus formas de uso se pueden mencionar las siguientes:
- Se puede consumir en forma de polvo, cápsulas, extracto o aceite.
- Se puede añadir a infusiones, jugos, yogures o cereales.
- Se puede aplicar sobre la piel o las heridas.
Hay que tener en cuenta su dosis y su interacción con otros medicamentos, ya que puede causar diarrea, náuseas, vómitos o hipotensión.
Ciclamen (Cyclamen spp.)
El ciclamen es una planta bulbosa originaria de los bosques mediterráneos, donde se usa para tratar problemas nasales, sinusitis, otitis, cefaleas, migrañas, tos y asma. Entre sus propiedades se destacan las siguientes:
- Tiene efectos descongestionantes, antiinflamatorios, analgésicos y expectorantes.
- Ayuda a aliviar la congestión nasal, la inflamación de los senos paranasales, el dolor de oído, el dolor de cabeza, la migraña, la tos y el asma.
- Contiene saponinas, flavonoides, ácidos orgánicos y aceites esenciales.
Entre sus beneficios se encuentran los siguientes:
- Facilita la respiración y mejora la oxigenación del organismo.
- Reduce la inflamación y el dolor de las vías respiratorias y auditivas.
- Calma el sistema nervioso y relaja los músculos.
- Favorece la expulsión de las flemas y las secreciones nasales.
Entre sus formas de uso se pueden mencionar las siguientes:
- Se puede consumir en forma de gotas nasales, inhalaciones o infusiones.
- Se puede aplicar sobre la frente, las sienes o las aletas de la nariz.
- Se puede masajear el pecho o la espalda con un aceite esencial diluido.
Hay que tener cuidado con su dosis y su toxicidad, ya que puede causar irritación, náuseas, vómitos o convulsiones.
Kalanchoe (Kalanchoe spp.)
El kalanchoe es un género de plantas suculentas que pertenece a la familia de las crasuláceas. Tiene más de 120 especies, muchas de ellas originarias de África, Madagascar y Asia. Se caracterizan por tener hojas carnosas, flores tubulares y frutos en forma de cápsula. Entre sus propiedades se destacan las siguientes:
- Tiene efectos antiinflamatorios, cicatrizantes, antibióticos, antivirales y antitumorales.
- Ayuda a tratar inflamaciones, heridas, infecciones, quemaduras, úlceras, problemas respiratorios y digestivos, entre otros.
- Contiene flavonoides, taninos, saponinas, ácidos orgánicos y bufadienólidos.
Entre sus beneficios se encuentran los siguientes:
- Alivia el dolor y la inflamación de las articulaciones, los músculos y la piel.
- Acelera la curación y la regeneración de los tejidos dañados.
- Combate las bacterias, los virus y los hongos que causan enfermedades infecciosas.
- Inhibe el crecimiento de células cancerosas y potencia los efectos de la quimioterapia.
- Mejora la función respiratoria y digestiva.
Entre sus formas de uso se pueden mencionar las siguientes:
- Se puede consumir en forma de infusión, tintura, jarabe, cataplasma o zumo.
- Se puede aplicar sobre la piel o las mucosas afectadas.
- Se puede inhalar el vapor de sus hojas o flores.
Hay que tener cuidado con su dosis y su toxicidad, ya que puede causar irritación, náuseas, vómitos o arritmias.
Chaparral
El chaparral es una planta arbustiva que crece en los desiertos de América del Norte y México. Es una de las plantas más antiguas del planeta y tiene un fuerte aroma a resina. Entre sus propiedades se destacan las siguientes:
- Tiene efectos antioxidantes, anticancerígenos, antivirales y purificadores de la sangre.
- Ayuda a tratar el asma, la bronquitis, las alergias, el cáncer, la diabetes, la artritis y la psoriasis.
- Contiene flavonoides, taninos, saponinas, ácido nórdico y NDGA.
Entre sus beneficios se encuentran los siguientes:
- Protege las células del daño oxidativo y previene el envejecimiento prematuro.
- Inhibe el crecimiento de tumores malignos y potencia los efectos de la quimioterapia.
- Combate los virus y las bacterias que causan enfermedades infecciosas.
- Limpia el organismo de toxinas y metales pesados.
- Alivia el dolor y la inflamación de las articulaciones.
Entre sus formas de uso se pueden mencionar las siguientes:
- Se puede consumir en forma de infusión, tintura o extracto.
- Se puede aplicar sobre la piel o las mucosas afectadas.
- Se puede inhalar el vapor de sus hojas.
Hay que tener cuidado con su dosis y su toxicidad, ya que puede causar daño hepático, renal o hematológico.
Conclusión
Estas son solo algunas de las plantas medicinales poco conocidas que podemos tener en nuestro jardín. Todas ellas tienen propiedades y beneficios para la salud que vale la pena conocer y aprovechar. Eso sí, siempre con precaución y asesoramiento profesional, ya que también pueden tener efectos secundarios o interacciones con otros medicamentos.