Desde su retiro en 2022, Roger Federer dedica su tiempo a disfrutar junto a su familia intentando recuperar los momentos perdidos por la profesión. El pasado martes 8 de agosto, el ex tenista festejó su cumpleaños número 42 a orillas del lago Zurich, donde se levanta imponente la mansión que el suizo compró en 2014.
La imponente vivienda fue adquirida por el ganador de 111 títulos a cambio de 7 millones de euros. En las entrañas de la mansión, Federer disfrutó de su cumpleaños rodeado de su familia a puro lujo. El estudio suizo BGS & Partner Architekten fue el encargado de diseñar el hogar de la familia Federer. La mansión cuenta con una gran cantidad de ventanales por lo que fue bautizada como “La mansión de cristal”.
La mansión cuenta con 18.000 metros cuadrados distribuidos en tres pisos. Tiene seis dormitorios, una terraza, gimnasio, un cine, spa, pileta y un garaje subterráneo en el que pueden estacionarse hasta nueve vehículos, allí, Roger guarda su gran colección de autos. En los alrededores, “La mansión de cristal” cuenta con una gran cantidad de árboles además de el acceso a la playa, uno de los lugares favoritos de la familia Federer.
La imponente vivienda se encuentra ubicada a 30 kilómetros de Zurich en Wollerau, en el cantón de Schwyz, zona donde el metro cuadrado está valuado en 11.000 euros. La familia de “Su majestad” está compuesta por la mujer de Roger, la ex tenista Mirka Vavrinec y sus cuatro hijos, las gemelas Myla y Charlene y los gemelos Leo y Lenny. En la mansión también pasa sus días Robert Federer, el padre de uno de los tenistas más grandes de la historia.
Tras 24 años de carrera, Roger Federer disfruta de los frutos recogidos durante tantos años de profesión, con 42 años recién cumplidos, el suizo tiene como prioridad a su familia con la que busca recuperar el tiempo perdido, lugar donde disfrutar no le falta.