Si eres de esas personas que le gusta sorprender a sus invitados con ideas originales y creativas, y además tienes en tu jardín algunas suculentas y cactus, en el día de hoy te traemos una idea manualidades para crear fácilmente y con poco trabajo, unos vívidos y delicados souvenirs, que además son amigables con la naturaleza.
Las suculentas son plantas que almacenan agua en sus hojas, tallos o raíces, y que pueden sobrevivir en condiciones de sequía. Los cactus son un tipo de suculentas que se caracterizan por tener espinas. Ambas son ideales para crear mini jardineras con corchos, ya que no necesitan mucha tierra ni riego, ni mantenimiento.
Los corchos son un material natural, biodegradable y reciclable, que se obtiene de la corteza del alcornoque. Además de ser usados para tapar botellas de vino o champán, los corchos tienen muchas otras aplicaciones en el ámbito de las manualidades. Así que tenemos motivos suficientes para combinar ambas cosas.
Materiales
- Corchos de vino o champán
- Una navaja afilada (ideal prensa y agujereadora)
- Pegamento (puedes hacerlo con pegamento caliente o pegamento frío tipo Unipox)
- Imanes de neodimio (puedes usar una plancha de imanes autoadhesivas que se comercializan en internet)
- Esquejes de suculentas o cactus
- Una botella rociadora con agua
- 1 o 2 puñados de sustrato para suculentas (dependiendo de la cantidad de unidades a fabricar)
Paso a paso para implementar esta bonita idea
Con Agujereadora
El primer método, que es el más sofisticado ya que requiere de que tengas una prensa y una agujereadora eléctrica, consiste en crear una cavidad uniforme, haciendo el agujero de a poco, y ensanchándolo a conciencia, lo suficientemente para agregar el sustrato y el esqueje, pero que a la vez deje una pared suficiente al corcho para ser resistente.
El agujero debe tener una profundidad suficiente para albergar la raíz de la suculenta, pero sin llegar al otro extremo del corcho, para ello agregué una bandita elástica en la mecha para saber hasta que profundidad agujerear. Luego simplemente hice el agujero. Por último, en un lateral, por debajo de donde instalaremos el imán más adelante, haz un agujero que se conecte con el principal, de ser posible, con una mecha más pequeña. Este oficiará de respiración de la mini maceta.
Con navaja
Otra posibilidad, es hacer exactamente lo mismo con una navaja afilada. Lograrás el mismo resultado, aunque deberás invertir más tiempo por cada corcho que realices ya que la tarea es más laboriosa, sobre todo para lograr precisión en la forma y profundidad del agujero. Si optas por esta técnica, el agujero lateral de drenaje te sugiero hacerlo con un tornillo ancho y redondear la cavidad con la punta de la navaja.
Ahora, toma un imán, (el ideal es el imán de Neomidio de 8mm x 1mm), y adhiere a la pared lateral del corcho, preferentemente hazlo en la zona superior del agujero de drenaje. Con esto lograrás que dicho agujero quede oculto (ya que quedará contra la heladera). Para ello, puedes utilizar una pistola de pegamento de silicona caliente o bien un pegamento del tipo Unipox, deja secar muy bien antes de avanzar.
Ahora es tiempo de rellenar el agujero de cada corcho con un poco de tierra, presionando ligeramente para que quede algo compacta.
Corta un esqueje de una planta suculenta o un cactus, dejando un tallo de uno o dos centímetros, puedes hacerlo hasta tres de ser necesario. Si el esqueje tiene espinas, usa unos guantes o unas pinzas para manipularlo. Agrega suavemente, y una vez que lo hayas plantado, presiona suavemente la tierra a su alrededor.
Rocía un poco de agua sobre la planta, sin mojar el corcho ni el imán. Repite este paso cada 15 o 20 días, según la necesidad de la planta.
¡Y ya está! Ya tienes unos souvenirs ecológicos con corchos y suculentas listos para regalar a tus amigos o familiares. Puedes ponerlos en la nevera, en una pizarra magnética o en cualquier superficie metálica. También puedes personalizarlos con etiquetas, pintura o accesorios.