La Lepidium latifolium es una planta nativa de Europa y Asia y conocida popularmente como Rompepiedras, Mastuerzo mayor, Lepidio, entre otros nombres que ponen el foco en su capacidad de tratar múltiples dolencias y malestares.
Sucede que al hablar de la Lepidium latifolium, hacemos referencia a una planta perenne sumamente famosa en el mundo entero por sus propiedades medicinales que resultan sumamente beneficiosas para el correcto funcionamiento de distintos sistemas del cuerpo humano.
En primer término, debemos decir que esta especie presenta hojas grandes con sabor a mostaza, diminutas semillas negras con forma de lenteja que se cría en zonas húmedas y boscosas y pequeñas flores blancas que brotan desde mayo y que suelen lucir vivaces incluso a finales del verano.
Sin embargo, la principal cualidad de esta preciada planta que puede medir como máximo tres metros de altura, es su valor medicinal, ya que ha demostrado tener valiosas propiedades diuréticas.
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Es que se trata de una especie que se emplea en su totalidad para fines médicos, siempre y cuando se la utilice estando fresca o recién cortada, debido a que presenta en su interior una esencia que tiene altas cantidades de azufre.
Experimentalmente, a la Lepidium latifolium se le atribuye la capacidad de disolución de cálculos de vías urinarias, como así también para el tratamiento preventivo ya que impide la formación de dichos cálculos.
Pero eso no es todo, ya que diversos artículos señalan que esta planta perteneciente a la familia Brassicaceae, resulta muy útil para aliviar los dolores de ciática, el dolor osteomuscular y hasta se dice que puede mejorar la acción sobre el metabolismo del páncreas y para ponerle fin a los problemas de vértigo.
En conclusión, se trata de una planta de propiedades medicinales tan beneficiosas que la llevan a ser una de las especies más valoradas que existen en todo el mundo.
Sobre su consumo
Esta especie puede ser consumida en cualquier momento del año y podemos hacerlo comiendo sus hojas y brotes frescos, los cuales tienen un sabor similar al de la col y la mostaza. En cuanto a la raíz, aseguran que tiene un gusto parecido al de los berros.
Al mismo tiempo, hay quienes prefieren consumir esta planta mediante la opción más tradicional, hablamos de una infusión, la cual se obtiene colocando 15 gr de planta fresca en un litro de agua recién hervida, para luego dejar reposar, colar y servir. Recuerda que como su sabor es un tanto amargo, puedes añadir stevia, miel o azúcar para que sea un poco más rica.