Detrás de muchos futbolistas que hoy disfrutan sus lujos y comodidades, desde costosos autos, enormes propiedades hasta excéntricos viajes por el mundo, existe una vida pasada en la que todo fue lucha y sacrificio. Martín Demichelis, disfrutando actualmente de un inmejorable presente en River Plate, recordó los momentos más complicados de su infancia.
Las recurrentes entrevistas a los jugadores de futbol o entrenadores en la mayoría de casos están dirigidas a un mismo tema: el presente de su respectivo equipo. Desde el diario “La Nación” entrevistaron a Martín Demichelis y fueron un poco más allá, indagando en su tormentoso pasado hasta llegar a su glorioso presente.
Pasado de sacrificio y muchas pérdidas
La vida de todo futbolista comienza con apenas 5 años, en la escuelita del barrio, en el caso del deté de River en Club Renato Cesarini, de Rosario. Luego dio el gran salto a River, para años más tarde consagrarse en el fútbol europeo, siendo figura destacada en el poderoso Bayer Munich alemán.
En el medio de una historia de película Martín Demichelis ha padecido difíciles pérdidas y problemas familiares, relatados por él mismo. “¿Proyectar? No, no. ¿Sabés por qué? Porque tenía muchos planes y me los arrebataron” comienza su relato el deté, vinculando aspectos del fútbol con la vida diaria.
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“Con 15 años no podía entender que mi mamá, enferma, se podía ir” continúa Martín Demichelis, revelando el primer traspié que sufrió en su infancia. “Después, tenía tantos planes con mi papá, que era un gran amigo, y de repente en un accidente de tránsito, viniendo de Justiniano Posse a buscar al aeropuerto a mi hermana que regresaba de Europa porque había nacido mi hija Lola, en 2013, encontró la muerte” añadió.
Se sucedieron además las pérdidas de su abuela, un accidente de su otro abuelo, su hermano mayor fallecido en un incidente con una persona alcoholizada y su único representante se quitó la vida. Cada una de estas situaciones, atravesadas en medio de su glorioso paso por el fútbol, y con el sostén y apoyo de su esposa, Evangelina Anderson.
Confiesa que en el presente disfruta el día a día, sin esa exigencia que existe por planificar largos años en el futuro. “Disfruto de volver a casa, de mi familia, de jugar al ajedrez con mi hija Lola, de los mates, de los perros” concluye Martín Demichelis.
La vida, y problemas, que hay detrás de los futbolistas en contadas ocasiones salen a la luz. En este caso Martín Demichelis decidió que era hora de hacerlo público para que se entienda un poco más el trasfondo que hay en la cabeza de todo deportista de élite. Es por ello que cada día los clubes de fútbol, y de todo deporte, se interiorizan más por la salud mental.