Un reciente estudio científico logró demostrar con datos precisos, como influye en nuestro organismo la interacción con los espacios verdes y la naturaleza.
Por lo general, la idea de espacios verdes se asocia con una situación de relajación y disfrute, en comparación al estrés que podemos encontrar en la rutina diaria de trabajo sobretodo en áreas muy pobladas.
No obstante, hasta el momento esa idea solo estaba enmarcada en un imaginario social que a decir verdad, no estaba muy lejos de la realidad.
Ser parte de una sociedad que promueve la producción continua implica un movimiento rutinario que se complementa con diversos hábitos de alimentación que pueden llegar a ser nocivos para el organismo.
En ese sentido, desde la Universidad de Northwestern (Estados Unidos) decidieron llevar a cabo un estudio para determinar como influye el contexto ambiental en nuestra vida.
Para ello, se basaron en lo que se conoce como edad epigenética la cual se mide a través de la sangre y determina un coeficiente etáreo de nuestro organismo, el cual cabe destacar que puede no coincidir con la cantidad de años vividos.
Rejuvenecimiento
A raíz de dicha investigación, los estudios científicos lograron determinar que el contacto con los espacios verdes disminuye esa edad epigenética a diferencia de lo que sucede con aquellas personas que pasan la mayor parte de su tiempo en las grandes urbes.
Con estos resultados, los cuales fueron publicados en al prestigiosa revista Science, se logró darle un marco científico a la idea de que la conexión con la naturaleza y los espacios verdes rejuvenece nuestro organismo.