El Feng Shui es un arte milenario que tiene como única finalidad lograr el perfecto equilibrio de las personas y su entorno. Esta cultura nos brinda consejos para que las vibraciones positivas fluyan con naturalidad por cada rincón de nuestro hogar, y que esto permita el ingreso de abundancia y prosperidad.
Para lograr el objetivo, el Feng Shui recomienda que evitemos colocar espejos en 3 lugares en particular. Y si bien nos encantan porque aportan un toque especial en la decoración, un espejo mal ubicado puede desequilibrar el flujo energético de los espacios. A continuación, te cuento cómo evitar que esto suceda.
No lo pongas enfrentado a la puerta de entrada
Según esta filosofía milenaria china, los espejos ubicados frente a la puerta de entrada pueden generar que la energía positiva rebote o bien se refleje hacia afuera. Esto podría generar inestabilidad en el hogar y hasta provocar pérdida de dinero.
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La mejor ubicación sería en las paredes laterales a la puerta principal. De esta manera, potenciarás las vibraciones de prosperidad.
Evita ponerlo en la cocina
De acuerdo a la creencia de los antiguos sabios, el reflejo de los espejos en la cocina puede duplicar visualmente los cuchillos y otros objetos cortantes, lo que podría atraer energías negativas.
Se cree que en la cocina se originan las vibraciones de abundancia, pero si un espejo está dando vueltas, podría interferir para que eso suceda.
No lo ubiques frente a la cama
Los espejos estimulan y hacen fluir el Chi, por lo que pueden atraer al dormitorio una excesiva cantidad de energía despierta. Si te reflejas de cuerpo completo, se estará retroalimentando toda la noche y es posible que no descanses bien.
Además, según el Feng Shui, pueden atraer energías de terceros, lo que podría interferir en la relación de pareja.