En un reciente estudio científico realizado por el Instituto Harry Perkins de Investigación Médica en Australia, quedó demostrado que las abejas podrían contener el secreto para tratar una de las formas más agresivas de cáncer de mama y que incluso lo destruyen.
La especialista que hizo este trabajo es, Ciara Duffy, de 25 años, y según sus estudios, quedó demostrado que, en los venenos de las abejas silvestres, poco estudiados hasta ahora, hay variantes más originales de la melitina, principal componente de su veneno, que podría tener aplicaciones en el cáncer de mama.
En la investigación, la joven médica probó que el efecto del veneno de 312 abejas y abejorros de Perth y Europa, funciona de manera prometedora sobre varios tipos de esta enfermedad.
Y los resultados, publicados en la revista “Nature Precision Oncology”, son más que positivos.
“Encontramos que tanto el veneno de abeja como la melitina redujeron de manera significativa, selectiva y rápida la viabilidad del cáncer de mama triple negativo y las células de cáncer de mama enriquecidas con HER2”, explicaron desde la institución.
Además, aseguraron que el veneno es extremadamente potente. “Descubrimos que la melitina puede destruir por completo las membranas de las células cancerosas en 60 minutos”. Una noticia que sin dudas, alienta a muchas mujeres del mundo.
Una luz en la oscuridad
Según el estudio científico, una concentración específica del veneno de abeja causó el 100% de la muerte de las células cancerosas con efectos mínimos en las células normales.
Por otra parte, se demostró que, en 20 minutos, la melitina también pudo reducir sustancialmente los mensajes químicos esenciales para el crecimiento y la división celular de las células que provocan cáncer de mama.