El Feng Shui, nos brinda ciertos consejos para que logremos el correcto equilibrio de nuestra vida. La intención de esta filosofía milenaria es lograr la armonía entre los seres humanos y su entorno. Para lograr el objetivo, toma en cuenta todos los objetos que nos rodean en nuestro hogar, esto incluye la decoración, los colores, las plantas y las flores, como, por ejemplo, los girasoles.
Para el Feng Shui, los girasoles poseen una gran energía positiva muy especial que logra atraer la prosperidad, el éxito y la abundancia. Pero, además, sirve como amuleto para la buena suerte. Su nombre se refiere a que el capítulo floral gira según la posición del Sol, razón por la que esta flor está relacionado con este astro tan poderoso.
Estas plantas son una representación de la positividad, vitalidad y longevidad. Por ese motivo, si alguien regala esta flor, es sinónimo de generosidad y buenos deseos para la persona que la recibe.
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También se cree que tienen el poder de ayudar a las personas a iniciar nuevos ciclos y concretar sus proyectos.
A continuación, te contamos cómo usar los girasoles, para atraer la prosperidad al hogar.
Dónde colocar los girasoles
Esta filosofía oriental, recomienda que coloques tus girasoles en la zona sur (orientación del fuego) de tu hogar. De esta manera, lograrás equilibrar todas las energías para atraer la prosperidad y buena suerte.
Cabe destacar que lo mejor es que cortes los tallos en forma diagonal y cambies su agua todos los días, para que las vibraciones no se estanquen y fluyan con normalidad.
Por último, el Feng Shui advierte que los girasoles deben estar ubicados en un lugar donde el sol no les impacte de forma directa, para que luzcan siempre radiantes y puedan impartir sus energías.