La percepción que tenemos sobre el mundo que nos rodea está íntimamente ligada a la decodificación de nuestro cerebro ante los estímulos que percibimos a través de los sentidos. En esa línea, hoy buscaremos descifrar que es lo que representa el color morado en base a la psicología.
Los estímulos visuales que captamos constantemente impactan de lleno en nuestra personalidad y es por eso que algunas personas prefieren algunos colores sobre otros. Según la psicología, el morado dice mucho de aquellos que lo eligen revelando algunos aspectos que se relacionan con él.
En principio, vale la pena destacar que el morado se encuentra en un punto medio entre los tonos fríos y cálidos. Por lo general, los fríos nos brindan una sensación de concentración que incrementa nuestra capacidad de atención.
En cambio, los tonos más cálidos nos llevan a situación de relajación, reflexión e introspección. Es por ello que el morado, al encontrarse en medio de estos dos mundos, adquiere un significado ambivalente, nutriéndose de ambos.
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Es por ello que muchas personas lo utilizan para decorar sus ambientes de trabajo con el objetivo de conseguir un espacio de creatividad y reflexión para poder llevar adelante su tarea.
Por otra parte, la psicología advierte que el color morado remite a sentimientos como la valentía, el coraje y la determinación, mientras que en ambientes profesionales, destaca por su alto valor y la posibilidad de alcanzar metas elevadas.
Cara B
Sin embargo, no todo lo que se relaciona con el color morado desprende sensaciones positivas. En este sentido, hace falta resaltar algunos aspectos negativos que se relacionan con este color según la psicología.
Entre ellos, se encuentran algunos sentimientos como la arrogancia o la vanidad, remitiéndose a la necesidad de resaltar a toda costa. Este tipo de significaciones pueden encontrarse en objetos materiales que nos representen como por ejemplo los autos, o la vestimenta que elegimos cada día.
No obstante, para otros puede remitir a otro tipo de sensaciones, ligadas más al plano afectivo. Según la psicología, quienes optan por este color también podrían transmitir una evocación a la melancolía, o incluso un sentimiento de aislación o introspección social.
Lo cierto es que el morado, siendo un color de los “poco comunes”, sin dudas contiene un atractivo muy particular para quien lo elige, demostrando así una parte propia de su personalidad que busca dar a conocer al mundo.