Nicolás Tagliafico realizó un stream en el que repasó la infartante final ante Francia en la que la Selección Argentina se coronó campeona del mundo. El ex defensor de Banfield e Independiente aseguró que la final fue “de película, una verdadera locura”.
“Cuando Leo Messi metió el tercero, me di cuenta de que éramos campeones del mundo, pero después me cayó la ficha de que faltaban un par de capítulos más” explicó el defensor que tuvo un destacada actuación tanto en la semifinal ante Croacia como en la final ante el conjunto francés. En el stream también hubo tiempo para el amor, en un momento de la transmisión, Carolina Calvagni, mujer de Nicolás Tagliafico, interrumpió al campeón del mundo para darle un beso. “Pará que estamos en cámara” fue la simpática reacción del defensor del Lyon de Francia.
Luego de la inédita e inolvidable superioridad de Argentina sobre Francia llegó la inesperada reacción de Mbappé y compañía, al momento de explicar sus sensaciones cuando el partido se puso 2-2 Tagliafico reveló que: “Lo primero que se me vino a la cabeza en ese momento fue el gol de Holanda en cuartos. Sentí que esto ya nos había pasado. Por eso no me desesperé. Fue un baldazo, terrible, estás hablando de una final del mundo en la que la rompiste toda durante 75 minutos. No se nos podía escapar. Pensé esto no está pasando, de vuelta la misma película”.
El lateral izquierdo no ahorró detalles a la hora de transmitir la catarata de sentimientos que lo invadieron durante la final: “Pareciera que fue escrito por alguien. Del 2 a 0 al 2 a 2 fue una locura. Y cuando nos volvieron a empatar en el 3 a 3 parecía mentira. Cuando se lo cuente a alguien dentro de 15 años no me van a creer. Y en los penales me agarré a Thiago Almada y cuando Mbappé la metió, me dio mucho miedo, porque generalmente el equipo que empieza pateando le traslada la presión al otro. Sin embargo, cuando pateó Leo tuvo una tranquilidad terrible. Fue como si estuviera jugando con su hijo Mateo”.
La hora de los penales
Llegaron entonces la infartante definición por penales: “Después del penal de Leo, cerré los ojos y empecé a decir unas palabras, que me las voy a guardar. Empecé como a rezar. Las repetía todo el tiempo. Y aunque escuchaba el grito de mis compañeros y de la gente, las seguía repitiendo. Desde ese momento dejé de ver todo. Cuando Francia erró el segundo penal, me di cuenta de que tenía que ser nuestra. Había muy pocas chances de que eso no pasara”.
Para cerrar, el defensor campeón del mundo dejó en claro que nada se asemeja a jugar una final del mundo: “Siento que después de la final del Mundo no hay presión que nos joda. Es lo máximo. Si me llega a pasar algo más en la carrera, incluso de esta manera, no va a tener la magnitud de ese partido. Una locura. Creo que nos va a pasar a todos los que estuvimos en esa final. Fue de película”.