El Feng Shui es una filosofía oriental que busca aportar equilibrio en todo el hogar para que las energías puedan fluir correctamente y estas tengan una influencia positiva en nuestra vida. Para lograr el objetivo, esta técnica utiliza la decoración, los colores, los adornos y hasta las plantas.
Según el Feng Shui, las plantas ayudan a mejorar la concentración, a aumentar nuestra productividad, equilibrar la energía del ambiente, generar felicidad, reducir el estrés e incrementar el flujo energético. Sin embargo, esta técnica ancestral desaprueba rotundamente el uso de estas especies en formas artificiales.
De acuerdo a este sistema filosófico, las plantas y flores artificiales significan energía muerta, la cual no fluye y se queda ahí estancada. Esto debido a que se trata de representaciones inertes de algo vivo, lo cual no resulta beneficioso para el correcto flujo de energía de nuestro hogar.
Te podría interesar
Incluso se cree que, si las especies de este tipo están en exceso, toda la energía buena se atrofiará, haciéndonos sentir estresados y cansados. Como si fuera poco, atraerá la mala fortuna a nuestra casa, debido a que las vibraciones negativas nos acompañarán.
Recomendación
Es comprensible que haya algunos hogares con poca luz y no aptos para el crecimiento de plantas, pero hay algunas especies como las suculentas, cactus o los palos de bambú, que son recomendables para estos espacios, ya que son muy resistentes a cualquier ambiente.
Según el Feng Shui, las plantas y flores artificiales no son necesarias, y en caso de que quieras representar alguna energía en específico, puedes hacerlo con cuadros o fotografías que no afectarán las vibraciones energéticas.