En los últimos días sonaron con fuerza unos rumores acerca de una supuesta crisis de pareja entre Micaela Viciconte y Fabián Cubero, teniendo en cuenta que habían dejado de mostrarse juntos en las redes sociales, sumado a otros indicios.
Sin embargo, pese al silencio que ambos decidieron mantener al respecto desde sus plataformas, finalmente Micaela Viciconte rompió el silencio en televisión y habló en detalles de cómo está actualmente la relación con Fabián Cubero.
Sucede que asegurando estar al tanto de los últimos rumores que surgieron, Mica aprovechó el aire de “Ariel en su salsa”, el ciclo en el cual se desempeña como panelista, para hablar a fondo sobre el tema, tras ser consultada por Ariel Rodríguez Palacios sobre el regreso del viaje a Brasil que hizo “Poroto”.
“Ya volvió, aunque no llegó en horario y fue todo un caos. Hubo problemas en casa pero no hubo crisis como dicen todos los portales.”
Aduciendo que el retraso en el vuelo que tomó el padre de su hijo complicó todas las cosas en el hogar, la ganadora de “MasterChef Celebrity” puso paños fríos y desmintió que estén atravesando una crisis de pareja de manera rotunda. Al mismo tiempo, amplió su relato sin ánimos de que esta versión siga circulando.
“No hay crisis ni pasa nada. Estamos muy bien, bárbaros. No, nada de eso, si llegó tarde y fue todo un caos. No sabés lo que fue anoche nuestra casa; un quilombo.”
En conclusión, la guardavidas echó por tierra estas versiones de conflictos en la pareja, algo que marcha en la misma línea con sus últimos posteos, a donde se la puede ver con Cubero sumamente sonrientes, disfrutando de una tarde soleada en compañía de sus amigos más cercanos.
(Fuente: Instagram).
Se las ingenia
Desde un principio la panelista sabía que criar a su hijo y a su vez cumplir con sus compromisos laborales, no sería tarea sencilla. Es por eso que desde sus “stories” mostró cómo se las ingenia para hacer dos cosas a la vez.
En las imágenes, un tanto graciosas, se la puede ver a Micaela Viciconte moviendo el coche de Luca Cubero, mientras aprovecha para alimentarse y así poder continuar con su agenda de trabajo. Una escena muy usual entre los padres de niños pequeños que buscan la manera de optimizar el tiempo al máximo.