La Laver Cup 2022 sin dudas será recordada por dos grandes hechos históricos, el primero y el más significativo es el retiro de Roger Federer luego del partido disputado en dobles junto a Rafa Nadal. Además, el torneo disputado en Londres tuvo por primera vez al Resto del Mundo, donde participó Diego Schwartzman, como ganador del certamen.
En el cierre de la histórica competencia Roger Federer habló durante la entrega del trofeo y confirmó la sede de la edición 2023. “No tenía un discurso preparado porque no sabía que iba a tener que hablar. Primero que nada felicitar al Team World, impresionante remontada. Estaba muy confiado cuando llegué hoy, pero buen trabajo para John McEnroe y el resto del equipo. Lo merecen y espero que celebren como les dije. Por supuesto, mi equipo también estuvo fantástico, disfruté cada minuto. Fue grandioso y emocionante por momentos. El equipo se recuperó aunque los hice perder y no puedo darle las gracias lo suficiente” expresó el suizo.
Luego el ganador de 20 Grand Slams agregó: “La próxima edición estaré presente para apoyar a los dos equipos. Y darle las gracias a Rod Laver que siempre está presente. Tu presencia es muy importante para mí y juntos podemos inspirar a las siguientes generaciones del tenis. Espero verlos en Vancouver, gracias a la organización, sponsors y a los fans por haber hecho un increíble evento”.
La última jornada se inició con el equipo europeo venciendo por 8-4, sin embargo el Resto del Mundo se impuso gracias a las victorias de Félix Auger-Aliassime primero en dobles junto a Jack Sock ante Matteo Berrettini y Andy Murray y después en singles ante Novak Djokovic. El broche final lo puso Frances Tiafoe, que se impuso ante Stefanos Tsitsipas, sellando el resultado final de 13 a 8 a favor de Resto del Mundo.
La primera vez
Por primera vez desde que se disputa la competencia el equipo de Resto del Mundo se quedó con el triunfo. El Team Europa había ganado las anteriores ediciones, 2017 en Praga; 2018 en Chicago; 2019 en Ginebra y en 2021 la edición de Boston.
En la competencia en la que Roger Federer dijo adiós, el Resto del Mundo rompió con la hegemonía europea, toda una señal.