Martes 14 de Noviembre 2023
RECETA

Strudel Vienés, una receta con mucho relleno y poca masa

Con esta receta te enseñamos a cocinar uno de los postres más famosos del mundo

Escrito en ESPECTÁCULOS el

La historia del strudel comienza hace más de 300 años cuando se escribió una de las primeras recetas. El origen de la particular masa con la que se elabora, se sitúa en el Oriente Medio, en una época de guerras y batallas.

Los primeros en distribuir esta receta fueron los árabes que llevaron la preparación a Egipto, Palestina, Siria, Turquia y Austria. La cocina vienesa desarrolló este plato y lo modifico hasta llegar a ser lo que conocemos hoy.

Específicamente el strudel de manzana consiste en un rollo muy fino de masa, a veces también de hojaldre, relleno de compota de manzana, azúcar, canela y pasas. Existen muy pocos postres de manzana tan deliciosos como este. A continuación te cuento el paso a paso de la receta para que puedas realizar este clásico de la cocina en tu casa.

Ingredientes

Para la masa

125 gr de harina leudante

1 huevo 

50 ml de agua

1 pizca de sal

1 cucharada de aceite

Para el relleno

4 manzanas verdes grandes

80 gr de pasas de uva

50 ml de ron (también puede ser licor tipo Bourbon)

100 gr de nueces

40 gr de pan rallado

8 cucharadas de azúcar

2 cucharaditas de esencia de vainilla

Jugo de 1 limón

30 gramos de manteca

Modo de preparación

Comencemos con el primer paso esta tradicional receta. En un recipiente con tapa mezclar las pasas con el ron tibio, esto hará que se maceren antes de integrarlas al relleno. Tapamos y reservamos.

Empezamos a preparar la masa, en un bowl mezclamos la harina, un huevo, aceite, una pizca de sal e integramos bien, tapamos y dejamos que la masa repose por 15 minutos.

Para hacer el relleno es aconsejable usar manzanas verdes ya que tienen más acidez que las rojas. Sin importar cuales sean, pelamos y quitamos tronco y semillas, cortamos el resto en cubos de entre 1 y 1.5 centímetros.

Ponemos a fuego medio un sartén con una cucharada de manteca, agregamos las manzanas cortadas, el jugo de medio limón y 3 cucharadas de azúcar. Mezclamos hasta que las manzanas suelten su jugo, esperamos a que ese jugo se evapore y retiramos del fuego. Reservamos hasta enfriar.

Mientras las manzanas se enfrían, en una superficie plana o una mesada ponemos la masa y comenzamos a amasar enérgicamente por 7 minutos, el resultado debe ser una masa suave y lisa. Formamos un bollo que vamos a envolver en film y llevar por 30 minutos a la heladera.

Terminamos de preparar el relleno agregando las nueces picadas, pan rallado, las pasas previamente maceradas y la esencia de vainilla.

Para estirar la masa extendemos un paño grande de 50 por 70 centímetros arriba de una superficie plana, como se ve en la siguiente imagen. Esta será nuestra mesa de trabajo donde estiraremos la masa.

Agregamos harina sobre el paño para evitar que se pegue y con ayuda de un palo de amasar estiramos la masa, desde adentro hacia afuera. Cuando ya esta fina estiramos con las manos, colocando la masa sobre los puños y haciendo movimientos hacia afuera. El objetivo de estirar con las manos es lograr una masa muy fina, casi transparente.

Nuevamente pasamos la masa al paño y continuamos estirando con las manos hasta lograr un espesor casi transparente y formar un rectángulo.

Para comprobar que la masa está en el grosor correcto pone un diario debajo e intenta leer lo que dice

Llegó el momento de preparar el Strudel, haremos cada paso con mucho amor y cuidado. Primero pintamos con manteca derretida toda la masa, después ponemos el relleno en uno de los bordes, como se ve en la siguiente imagen.

El siguiente paso es cortar los bordes para quitar imperfecciones de espesor. Con ayuda del paño comenzamos a enrollar la masa haciendo que el relleno quede dentro, mientras avanzamos pintamos con manteca y cerramos bien. Si quedaron excedentes de masa en las puntas, las cerramos y cortamos el resto.

Colocamos el strudel en una bandeja de horno con papel manteca o la fuente enmantecada y enharinada, hacemos cortes en la parte de arriba para que salga el vapor y cubrimos con mantequilla derretida por encima. Llevamos al horno por 35 minutos o hasta que quede dorado por fuera. Cuando esté templado, cortamos, espolvoreamos con azúcar impalpable y nuestra receta queda lista para servir y disfrutar.