Desde la riviera francesa, Demi Moore enamoró a todos sus fans con esta espectacular colección de trajes de baño vintage inspirada para mujeres de más de 40 años, que quieren lucir hermosas y sin complejos en la playa o la pileta en este verano, sin dejar de lado el glamour y la sofisticación.
La actriz de Hollywood se unió a la marca de ropa Andie, fundada por la emprendedora Melanie Travis. Una diseñadora que se centra en los detalles y apunta a derribar los estereotipos de los cuerpos perfectos. En esa misma línea, Demi Moore fue la co creadora de esta nueva colección.
“Como partidariA, inversionista y fan desde hace mucho tiempo Andie, no podría haber estado más emocionada cuando la fundadora Melanie Travios me pidió que co-diseñara esta colección.”
La actriz se dejó ver muy emocionada al participar en todo el proceso de esa nueva colección de trajes de baño y no ocultó el orgullo por su creación. “¡Crear estas piezas fue muy divertido y espero que las amen tanto como a nosotros nos encantó hacerlas!”.
Trajes de baño vintage para mujeres reales, de talles reales, con diseños inspirados en cuerpos que superan los 40 años. Esos son los conceptos base con los que Demi y Melanie le dieron vida a su creación.
Las diseñadoras están extasiadas de poder brindar una nueva opción en un mercado tan competitivo y muchas veces cruel, donde los estereotipos de cuerpos perfectos siguen tomando la bandera de la moda. En este caso, Demi Moore, con 59 años de edad, decidió ser la imagen de su colección.
Demi Moore revivió una de sus mejores escenas en traje de baño en el cine
Moore es un derroche de elegancia y sensualidad. La actriz recordó esta semana una de sus escenas más candentes en traje de baño en el cine. Se trata de la toma en las playas de Los Ángeles, California, para la segunda entrega de “Los ángeles de Charlie”, en el 2003.
La actriz de Hollywood, Demi Moore, compartió esta semana parte de la escena en la que su personaje, Madison Lee, se encuentra con Natalie Cook, interpretada por Carmeon Díaz, y en la que deja su tabla de surf para subirse a un convertible rojo de la marca italiana Ferrari.