Las orquídeas pertenecen a la familia de las plantas monocotiledóneas, las cuales se distinguen por la complejidad de sus flores y por las interacciones ecológicas que tienen con los agentes polinizadores y con los hongos. Por lo que más se reconoce a estas plantas es por sus flores de simetría bilateral.
Lo que tienen las orquídeas es que son unas plantas muy hermosas, el formato de sus flores las hacen muy atractivas a la vista al igual que los colores de las mismas, aunque para que conserven su belleza es necesario que las mismas tengan un cuidado especial para que estén coloridas, sanas y no se sequen.
Para que las flores crezcan sanas, fuertes y tengan un hermoso color es necesario acompañar su cuidado con abono ya que es fundamental para el desarrollo de cualquier planta, si bien se pueden comprar estos abonos existen unos caseros que contienen los nutrientes necesarios para que puedan crecer sanas y fuertes.
Para conseguir este abono solo necesitarás tres ingredientes que seguramente tendrás en tu cocina, los cuales contienen vitamina B y minerales calcio, magnesio, potasio, fósforo y azufre.
½ litro de agua de arroz
½ cucharadita de canela
Cáscaras de banana
Para realizar el abono se debe triturar las cáscaras de bananas y luego mezclar todos los ingredientes en un recipiente, luego se debe añadir el agua a la tierra de la planta, esto debe realizarse 2 veces a la semana durante un mes y con el tiempo verás que las flores crecen sanas, fuertes y tendrán un excelente color.
Otros cuidados necesarios
Es muy importante tener en cuenta el riego que necesita esta planta, pues el abono solamente no alcanza, pues hay una forma específica de regarla para que crezca linda y evitemos exceder el riego de la misma, la mejor forma de hacerlo es sumergiendo la planta en un balde con agua durante 15 minutos, teniendo en cuenta que el agua no debe sobrepasar el tallo central ni se deben mojar sus hojas, de esta forma tendrás un riego perfecto.
Al riego y la aplicación del abono es necesario acompañarlo con varios cuidados más, pues las orquídeas necesitan de muchísima iluminación pero sin recibir al sol directo, estas plantas deben estar colocadas en macetas de vidrio transparente para que dicha luz llegue a sus raíces. Su riego debe realizarse cuando la tierra este seca por completo y es muy importante que no tenga cambios bruscos de temperatura, de esta forma crecerán muy sanas y fuertes.