La planta a la que haré referencia hoy, es conocida como Oreja de Elefante. Esta planta se caracteriza principalmente por sus hojas espectacularmente grandes, y con la forma de corazón invertido. La especie que corresponde a la familia de las aráceas es de uso ornamental, aunque también es comestible. Sus raíces ricas en almidón, contienen entre 1 y 8,8% de proteína.
Las hojas con las que cuenta esta planta llegan a medir hasta un metro y la oreja de elefante en sí, puede alcanzar hasta 5 metros, esta planta es color verde claro y su forma recuerda mucho a las famosas calas, la floración de la oreja de elefante llega durante el verano y cuando esto ocurre producen un gran aroma.
Si querés tener esta planta en tu hogar es importante tener en cuenta que no soporta el frío intenso ni las heladas, como también se deben alejar de fuentes de calor ya que las mismas pueden secarlas, para que puedas decorar tu hogar con ella acá te dejamos algunos cuidados para que la misma florezca, sana y muy fuerte.
Si bien es una planta tropical, la misma se puede cultivar tanto fuera del hogar como también en el interior, si querés tenerla en el jardín de tu hogar será necesario que la coloques en una zona que sea amplia y en lo posible con un suelo que ofrezca un buen drenaje y cuente con semisombra, ya que si bien es una planta que se da muy bien en zonas cálidas, el sol directo puede llegar a quemarla.
Si se quiere tener en el interior del hogar tiene que estar alejada de los calefactores o estufas que pueden llevar a secarla y siempre se deben tener en macetas de arcilla, las cuales drenan mucho mejor que las de plástico los excesos de humedad, necesitan una buena iluminación pero como en el punto anterior deben estar protegidas del sol directo.
Riego y sustrato
Para que florezca sana y fuerte su riego debe ser frecuente, sobre todo en julio y agosto, por otro lado es necesario que reciban mucho abono, el cual esté repleto de nutrientes, pues para esto el fertilizante debe ser perfecto, en lo posible el mismo debe ser ecológico las mejores opciones son el humus de lombriz o el compost.
Por último el sustrato de esta planta debe contar con un buen drenaje, ya que es vital debido a los riegos frecuentes que tendrá la misma, pero debe evitarse que se encharque el suelo. El sustrato de la maceta debe prepararse con sustrato de fibra de coco, humus de lombriz y turba en partes iguales, además de contar con una buena cantidad de vermiculita y perlita, ya que es una mezcla muy nutritiva para la planta.