El bambú de la suerte es una excelente planta que no solo puede combinar muy bien en tus espacios, sino que además tiene la particular características de atraer las buenas energías.
Pero para que ambas cuestiones surjan el efecto deseado, es necesario que el bambú de la suerte (Dracaena sanderiana) se encuentre en un buen lugar y en óptimas condiciones de salud desplegando su hermoso color verde.
Esta particular plantas se la considera como un símbolo de prosperidad dado que según algunas creencias, representa a los cinco elementos (madera, tierra, metal, agua y fuego) los cuales son la base del equilibrio.
Ahora, algunos de los indicios que podrían dar cuenta de que tu bambú estaría falto de nutrientes, pueden ser su color amarillento o falta de crecimiento. Para ello te vamos a dejar un abono natural con ingredientes que seguramente tienes en tu cocina para verter esta situación.
Ingredientes
2 cucharadas de aserrín.
5 cáscaras de huevo.
Medio litro de agua.
4 cucharadas canela.
Una pizca de cúrcuma.
Una botella de plástico.
Preparación
Para comenzar, se debe hervir el agua junto con el aserrín y las cáscaras de huevo. Una vez que alcance el punto de ebullición, se agrega la canela. Luego se cocina al fuego por otros 5 minutos, lo retiramos y agregamos la cúrcuma.
Una vez que se enfrió, lo siguiente será colocarlo en una botella y guardarlo en la heladera por 3 horas antes de que esté listo para usarse.
Este fertilizante tiene una duración de dos semanas. Riega tu bambú de la suerte cada vez que la tierra este sea y comenzarás a notar su recuperación en los primeros siete días.