Invitado al programa de Germán Paoloski en las noches de Telefé, Matías Alé mostró su faceta pasada, según asegura, la cual lo llevó a ser un personaje público del medio.
Dándose a conocer como el novio de Graciela Alfano a principios de siglo, Matías Alé se abrió paso en los medios y el teatro como actor, pero su vida sentimental fue un tema de conversación en el ambiente.
Sobre todo por la fama de seductor que supo llevar a cuestas, la misma que le trajo tanto alegrías como decepciones. Centrándose en las alegrías, Paoloski hizo un reaconto de anécdotas que su invitado fue relatado a lo largo del programa.
Volviendo a esos años de fama, Alé recordó una situación romántica con la secretaria de un intendente, dando cuenta de sus armas de seducción. No obstante aseguró que no pasó a mayores.
Además, el actor habló de todos los temas, dejando perlas como su participación en determinados eventos que si bien son exóticos y hasta en un punto atrayentes, no son del agrado de todo el mundo.
Un caníbal desdentado
En la actualidad, Matías Alé se encuentra formando parte de la obra “Mi mujer se llama Mauricio” con la cual recorre el país junto a un gran elenco. Asimismo reconoció que logró mantener una estrecha relación con Pablo Rago con quien comparte escenario.
Si bien recordó con humor su pasado de seductor nato, lo cierto es que Matías Alé aseguró que ya no transita por esos mismos caminos. “Me retiré un poco, ya me mande muchas. No se si me hice vegano, pero cambié las prioridades” manifestó.