La espinaca es una verdura verdaderamente necesaria y buena para nuestro organismo, por lo que es muy importante sumarla a nuestra dieta para llevar un estilo de vida mucho más saludable y combatir ciertas afecciones en nuestra salud.
Gracias a su contenido de hierro la espinaca es una gran aliada contra la anemia, aunque para esto es necesario que también se consuma luego vitamina C para absorberlo, al contener fibra la espinaca logra evitar que se absorba el colesterol y ácidos biliares.
Además este vegetal tiene también una gran influencia en los problemas digestivos, la hipertensión, el sobrepeso, es ideal consumirla durante el embarazo y también protege a la vista, convirtiéndose en una de las verduras más completas en cuanto a beneficios.
Si consumir espinaca ya de por sí es bueno, es mucho mejor consumirla cuando es de una huerta propia, pues suelen ser mucho más saludables, ahora bien para tener tus propias espinacas no es necesario que tengas una gran huerta o un gran patio para cosecharlas, ya que también se puede hacer en una maceta.
Si querés empezar a cosechar este vegetal en tu hogar acá te dejamos el proceso y algunos tips para que logres tener la mejor espinaca a unos simples pasos.
¿Cómo cosechar espinaca?
Para poder plantar nuestras espinacas, será necesario tener a mano un macetero de 15 cm de profundidad y claramente semillas de espinaca. Lo primero que hay que hacer es esparcir las semillas al rededor de toda la superficie y entre ellas deberán tener una distancia de 20 cm.
Es necesario que la tierra en la que plantemos las espinacas esté húmeda, pero sin excederse en agua, además debe tener un compost generoso y para que crezca de forma sana es necesario que no esté en espacios calurosos.
Es necesario cuidarlas del calor porque este la hará crecer muy rápido y su sabor puede llegar a ser muy amargo, además es necesario plantar en desfaces de 2 semanas y de esta forma se proporciona una constante fuente de espinaca.