Tener plantas y suculentas en óptimas condiciones es el principal objetivo de todo aquel que las elige, tanto para el interior o exterior del hogar, como el principal protagonista a la hora de pensar en una cálida y natural decoración de los espacios. Por ello, es ideal que se vean deslumbrantes si la idea es que causen gran admiración.
Sin embargo, muchas veces sucede que por querer explotar toda su belleza, de manera involuntaria terminamos cometiendo algunos errores que pueden interrumpir el correcto desarrollo de las plantas y suculentas, por lo que a continuación detallaremos cuatro acciones que debes evitar para tener un jardín de ensueños.
Mucha sombra hace mal
La iluminación es un factor esencial en el crecimiento de todas las especies y aunque hay varias que se desarrollan en el interior del hogar, tampoco se las puede tener en un sitio oscuro durante todo el día.
Por eso, lo ideal sería colocarlas por algunas horas al alcance de la iluminación natural, lo que hará que se vean cada vez más radiantes.
Cuidado al trasplantar
Como algunas especies crecen muy rápidos se las debe trasplantar con mayor frecuencia, pero al momento de hacerlo te recomendamos hacerlo con el mayor de los cuidados para evitar que las raíces puedan dañarse.
Te sugerimos levantar tu planta poco a poco y con movimientos suaves hasta que sus raíces salgan por completo.
Especial cuidado en el riego
Este también es un paso determinante en el crecimiento, ya que si las regamos de golpe y en abundancia, las raíces podrían pudrirse.
Lo óptimo sería regarlas con agua a temperatura ambiente poco a poco, así le daremos tiempo a la tierra de humedecerse lo suficiente.
Evita podarlas más de la cuenta
Podar cualquier planta es de lo más común, ya que además de mejorar su apariencia ayuda a fortalecer su energía.
No obstante, si las podamos más de la cuenta podríamos causar un daño irreparable en sus tallos, por lo que te recomendamos podarlas lo justo y necesario.
En conclusión, si utilizas estas recomendaciones a rajatablas, podrás mantener tu jardín y tus plantas y suculentas de interiores, más resplandecientes que nunca; y ni hablar de lo bella que se verán aquellas que abren sus flores en la época primaveral.