El morrón, también conocido como pimiento es una verdura que suele ser muy versátil ya que se puede utilizar en cualquier preparación culinaria, dentro de la gastronomía existen infinidad de recetas en las cuales es el protagonista o suele utilizarse para darle sabor a algún platillo.
Al ser una verdura muy consumida, muchas personas optan por cultivar su propio morrón, al igual que con otros vegetales y frutas, esto no solo para tenerlo más a la mano, sino que también porque el sabor de una verdura cosechada en una huerta a la del mercado es sabido que varía muchísimo.
Antes de pasar a los distintos tips que te traemos de “Mendoza post” primero vamos a contarte algunos detalles para que tengas en mente al momento de plantar esta verdura. Primero tenés que tener en cuenta que es un vegetal que prefiere el calor, si es cosechado en temperaturas su proceso de crecimiento será aún más lento y el tiempo de germinación de los brotes del mismo es de 8 días.
Tips para una germinación exitosa
Ablandar la cáscara de la semilla: para que su germinación sea un poco más rápida es necesario que ablandemos la cáscara de la semilla del morrón, para esto se puede utilizar el té de manzanilla el cual no solo ayudará a ablandar la cáscara, sino que también matará a cualquier bacteria.
Para esto deberás preparar un té y luego con el mismo saquito preparar otro, de este modo la mezcla será un poco más débil, en el segundo té deberás remojar las semillas durante 24 o 48 horas y liego estará lista para su uso.
Congelador: otra opción es dejar las semillas del morrón en el freezer durante dos días, luego retirarlas y colocarlas dentro de una servilleta de pape doblada y luego humedecerla con agua. A continuación se deben colocar en un plato y cubrirlas con un tazón oscuro para posteriormente ubicarlas en un lugar cálido, para ver su progreso debemos verlas todos los días.
Germinar la semilla: este posiblemente sea el método que muchos conozcan, lo primero que debemos hacer es doblar la servilleta de papel en cuartos y humedecer, luego se colocan las semillas en el papel y se lleva a una bolsa y se sella, también se pueden utilizar las ziploc.
Luego poner la bolsa en un lugar cálido y todos los días hay que rociar la servilleta para que permanezca húmeda, una vez que las semillas estén con brotes podrás colocarlas bajo una capa ligera de tierra.
¡Y listo! De esta forma podrás germinar un poco más rápido las semillas de morrón, para que puedas disfrutar de su increíble sabor y decore con su llamativo color tu huerta.