En el año 1992 se estrenó la película “Jamón, Jamón”, para la cual el director Bigas Luna convocó a Penélope Cruz y a Javier Bardem, en ese momento la actriz y el actor comenzaron a sentir una fuerte atracción, pero en ese entonces solo eligieron llevar adelante una gran amistad.
En ese entonces Penélope Cruz tenía 16 años y Javier tenía 21, era la primera vez que los actores trabajaban juntos, por la edad de la actriz y por ser la primera vez que ambos convivían en el set de filmación prefirieron mantener una amistad, a pesar que luego cada uno siguió su camino los sentimientos que sentían uno por el otro permanecieron intactos.
Pero el destino los volvería a reencontrar en varias oportunidades, en 1997 los actores volvieron a trabajar en “Carne trémula", en esa oportunidad los sentimientos que sentían el uno por el otro no pudieron ocultarse, pero como ya eran actores reconocidos no quisieron estar envueltos en escándalos, por lo que no apostaron a tener una relación amorosa.
En el 2008 un amigo realizó una fiesta en la cual ninguno de los dos podía continuar ocultando sus sentimientos por lo que comenzaron a salir, recién en el 2010 realizaron su primera aparición como pareja, para dar esta noticia los actores eligieron presentarse en la alfombra roja de los “Premios Goya”.
Con el romance ya en boca de todos y siendo una de las parejas más querida y unida del mundo del cine, Penélope y Javier se casaron en las Bahamas, en la isla del actor Johny Depp y ya para el año 2011 el amor de ellos creció muchísimo más con la llegada de Leo, su primer hijo, mientras que en el 2013 llegó la pequeña Luna.
Sus hogares
Como la mayoría de los actores de Hollywood, Penélope y Javier fueron comprándose distintas residencias, aunque debido a sus compromisos laborales ambos, junto a sus hijos pasan mas tiempo en su casa de Los Ángeles, la cual esta muy cerca de la tan reconocida Sunset Boulevard.
Pero, como era de esperarse Penélope Cruz y Javier también compraron una enorme mansión en Madrid, en la cual la pareja y sus hijos disfrutan de su estadía cuando viajan a España, ya sea por compromisos laborales o para disfrutar de sus días libres en su tierra natal.