Guillermina Valdés mantuvo una relación que duró 14 años junto a Sebastián Ortega, con quien tuvo tres hijos Dante, Paloma y Helena. A medida que cada uno de sus hijos iban creciendo la empresaria comenzó a realizarse tatuajes con sus nombres, convirtiéndose en una tradición.
Luego de separarse de Sebastián Ortega, Guillermina Valdés inició su relación amorosa con Marcelo Tinelli en el año 2012, la pareja desde que inició su relación han atravesado varios rumores y crisis, pero en el 2014 llegaría su hijo Lorenzo, quien vendría a unir la familia de Tinelli y Valdés.
Pero a medida que Lolo iba creciendo había algo que llamaba muchísimo la atención, es que Guillermina no se había realizado el característico tatuaje que se había realizado con sus otros tres hijos, es que la empresaria no lograba encontrar el momento para poder llevarlo a cabo.
Pero la espera terminó y luego de casi ocho años Guillermina tuvo un rato libre y se pegó una escapada para ir a una casa de tatuajes, en la que cumplió con su tradición y se tatuó el nombre de su hijo más pequeño en el brazo.
En su cuenta de Instagram la pareja de Tinelli le mostró a sus seguidores su nuevo tatuaje , el cual es muy simple, solo tiene escrito el nombre de su hijo, a la historia en la que mostro la foto le escribió que le faltaba su cuarto hijo en la piel. Mientras que en su Twitter escribió que ya tenía a Dante, Paloma y Helena en su piel, pero le faltaba Lorenzo.
El consejo de su abuela que siempre aplica
En una oportunidad Guillermina reveló que las abuelas decían que se debe dormir sobre seda, porque el algodón absorbe la humedad del pelo y eso hace que se seque, como ella no tiene sabanas de seda lleva siempre un pañuelo de seda a cada lugar que va.
Es lo que usa para poder poner en la almohada y dormir sobre eso, Guillermina Valdés sostuvo que eso le mejoró mucho la calidad del pelo, por lo que cuando puede se lo recomienda a sus seguidoras para que lo implementen.