Esta semana, Nazarena Vélez fue presentada como la nueva “angelita” de LAM, en su regreso a la televisión por la pantalla de “América”. Enseguida, se convirtió en noticia por sus fuertes declaraciones contra Jorge Rial, y como si fuera poco, hace algunas horas se vio envuelta en un nuevo escándalo.
De este modo, Nazarena Vélez participó de la celebración por el reestreno del ciclo que conduce Ángel De Brito; compartiendo una cena con Yanina Latorre, Pía Shaw, Andrea Taboada, Ana Rosenfeld y Estefanía Berardi. Parece que allí la actriz tomó alguna copa de más, y un rato después, le traería consecuencias.
De regreso a su casa, y en compañía de la reconocida abogada, las flamantes panelistas fueron detenidas por un control policial de alcoholemia, y evidentemente la antigua vedette, superó el limite establecido de alcohol en sangre para conducir.
Fue la propia artista quien decidió compartir en sus redes su error, ya que prefería que la gente se entere por ella misma de lo sucedido. “Me acaba de parar la policía y me secuestran el auto”, contó desde sus historias.
Luego explicó que se había tomado solo una copa de vino, mientras que su acompañante no había consumido nada, por lo que se podría haber hecho cargo del volante; aunque no se dieron cuenta de lo grave de la situación.
En las últimas horas, Nazarena Vélez volvió a admitir su negligencia, y aprovechó para informarle a sus seguidores que todavía no le entregaron su camioneta, y que además, tuvo que poner mucho dinero por culpa de su equivocación.
Nazarena Vélez contra Jorge Rial
Hace algunos días, en "LAM" tocaron uno de los temas del momento, que sin dudas, es la separación de Jorge Rial y Romina Pereiro. Aprovechando la presencia de la actriz en el programa, fue consultada por su relación con el periodista, y sorprendió con sus dichos.
Nazarena Vélez, admitió que tiene algo de amor y diferencias con Rial. Contó que si bien él la ayudo mucho, es una persona un tanto mafiosa. Luego explicó que hace uno años, durante un alejamiento con el presentador, recibió un llamado suyo a modo de amenaza, dando a entender que su vínculo no es muy cercano.