Uno de los temas que de un tiempo a esta parte se viene tratando con mayor seriedad, es el cambio climático provocado por el calentamiento global, la falta de nieve y como esto repercute en el ser humano.
Según un artículo de DW de Alemania, las personas que viven en zonas frías y con nieve experimentan diferentes estados psicológicos debido a estos cambios.
El Polo Norte, ese mítico paraíso invernal en el Ártico, se está calentando tres veces más rápido que el promedio mundial.
El investigador especializado en eco-ansiedad Panu Pihkala, de la Universidad de Helsinki en Finlandia, denomina síntoma de “duelo climático” al estado psicológico que causa la pérdida de los paisajes invernales.
Comenta que aquellos que caminan hacia un glaciar, sienten la ansiedad que les genera la falta de nieve. Se sienten en duelo, como si estuvieran presenciando un funeral. Por eso el investigador Pihkala explica:
“El duelo climático es difícil de superar, porque anticipa una pérdida que a menudo no ha ocurrido”
Las personas padecen una tensión que el filósofo medioambiental Glenn Albrecht comentó en un artículo de la revista Australasian Psychiatry:
"A diferencia de la nostalgia, la melancolía o la añoranza que experimentan las personas cuando se separan de un hogar amado, la solastalgia es la angustia que produce el cambio ambiental"
La pérdida de los glaciares
Para las comunidades habituadas al paisaje invernal, como por ejemplo la comunidad Sami que vive cerca del Círculo Polar Ártico, la nieve es un elemento necesario y vital, tanto en su economía como para su tradición de pastoreos de renos.
La antropóloga cultural sami, Klemetti Näkkäläjärvi de la Universidad de Oulu en Finlandia, dijo que el calentamiento global provoca un cambio cultural para muchos pueblos indígenas. El desplazamiento que esto provoca hacia otras zonas, hace que se vayan modificando muchas cosas en su vida cotidiana, en algunos casos hasta el propio idioma.
La tristeza ante lo irremediable de la pérdida de los glaciares para la humanidad, hace que organizaciones ambientalistas ayuden a concientizar sobre las nefastas consecuencias que trae el sobrecalentamiento global.
Según los datos suministrados por Ecología Verde, casi un 10% de la superficie de nuestro planeta está cubierta por glaciares, la gran mayoría en los casquetes polares, donde se acumula casi el 75% del agua dulce de la Tierra.
Resulta fundamental entender que somos responsables en gran parte de estos sucesos que ocurren en la naturaleza.
La tristeza tiene que servir para tomar las medidas necesarias y evitar la contaminación que acelera el calentamiento, provoca la pérdida de nieve y de los paisajes invernales.