En el último mes a Débora D'Amato se la vio bastante alejada de la pantalla chica y esto tiene una razón más que entendible, ya que recientemente dio a luz a su segunda hija y se tomó la correspondiente licencia de maternidad para cuidar de su hija recién nacida.
Emocionada por tener entre sus brazos a Charo, Débora D'Amato decidió dar a conocer públicamente a su hija a través de “A la tarde”, el ciclo en el cual se desempeña como panelista y en medio de tanta felicidad dejó al descubierto el drama que vive con la pequeña.
La alegría de agrandar su familia le brota por los poros a la reconocida periodista, motivo por el cual decidió salir en vivo desde la comodidad de su hogar para mostrar cómo marcha todo con su beba.
Sin embargo, en medio de las felicitaciones de sus colegas por la belleza que irradia su segunda hija, Débora se tomó unos minutos para dejar en claro que no todo es color de rosas y expuso una fuerte comparación entre su primera hija, Lola, y la nena recién nacida, lo que la llevó a vivir una difícil situación.
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“Con Lola yo tuve una lactancia bastante tranquila. Charito nació con 40 semanas y cuando salió, salió prácticamente succionando. Lamentablemente siempre duele y tenés todo el derecho del mundo a decidir no querer darle.”
Es que de acuerdo al relato de la panelista, su hija nació con un desarrollo más avanzado en comparación con la primera, motivo por el cual le resultó mucho más difícil amamantarla, a tal punto que confesó que sus pechos le estaban “sangrando”.
Entonces, decidió combinar la lactancia materna con la mamadera y con mucho valor de por medio, la periodista hoy confirma que la situación es mucho más llevadera y está sumamente contenta de poder exponer su realidad sin temor a las críticas.
Dulzura total
Desde su perfil de Instagram, la panelista del ciclo de América subió hace solo unos días una postal que colmó de ternura la plataforma ya que se puede ver un primer plano de sus dos hijas fundiéndose en un enternecedor abrazo.
Asimismo, las tres juntas posaron para retratar una hermosa postal navideña en la que queda a la vista la fuerza femenina de Débora D'Amato por la valentía de criar dos hijas en soledad y de las pequeñas que ya demuestran que son súper compinches y compañeras.