El miércoles pasado, mientras apenas iniciaba su travesía un rayo mató a Germán Neculman, un hombre de 39 años que había comenzado sin saberlo el último viaje de su vida.
Para Germán Neculman, el recorrido en bicicleta desde la Quiaca, Jujuy, hasta Dina Huapi en Río Negro, era el proyecto soñado durante mucho tiempo, al que bautizó “El camino del Condor”.
Durante los últimos años había dedicado todo su esfuerzo para lograr equiparse y concretar el viaje. Lamentablemente solo llegó a pedalear 70 km de su sueño.
Como comentó Germán en sus redes:
“Fueron 9 años de trabajo de hormiga, comprando el equipamiento que llevo hoy conmigo, hablando de esto con quien compartiera un mate, una rica chela, un abrazo, una plaza, una pedaleada”.
De profesión electricista, resulta tristemente paradójico que justamente sea una descarga eléctrica del cielo, lo que termine apagando su vida.
Germán Neculman estaba casado con Romina y era padre de dos hijos, Eluney y Nehuen. Ellos sabían de su sueño y lo apoyaron siempre para que pudiera realizar esta aventura. En sus recuerdos quedarán las últimas palabras que Germán publicó:
“Actualizando un poco el recorrido, salimos el 4 de enero de La Quiaca a las 13 hs, terrible la falta de oxígeno y el calor, llegando a La intermedia a las 17 hs (fueron solo 35 Km), hicimos noche ahí. Hoy arrancamos a las 10 am, aprovechando el viento a favor, metimos 37 Km en 2 hs increíble ahora nos encontramos en Abra Pampa, terminando de almorzar, la idea es seguir hasta 3 cruces ( 29 Km aprox)”
Nadie puede anticipar lo inevitable, y aunque resulte difícil comprender estas tragedias cabe resaltar que los hombres que cumplen sus sueños, son aquellos que se sienten plenos y a los que ni siquiera la muerte les tuerce el destino.
El triste adiós de sus seres queridos
Son muchos y conmovedores los mensajes del adiós a Germán, los familiares decidieron dejar abiertas sus redes sociales para que los seguidores lo puedan despedir.
En este sentido, hasta la Intendenta de Dina Huapi, Mónica Balseiro, dedicó emotivas palabras a Germán. Al igual que sus compañeros bomberos que siempre lo consideraron un gran colaborador en la comunidad.
Todos lamentamos la pérdida de Germán Neculman y recordaremos su mensaje "amen mucho y sean felices". Un trágico final para un hombre joven, que solo quería pedalear la vida un tiempo más.