La pandemia iniciada a mediados del 2020 dio lugar a un hecho que no había sucedido hace siglos: el hombre se resguardo en su casa por algunos días, frenando la constante producción capitalista que mueve al mundo y revirtiendo (en parte) el cambio climático. El "Panel de Control Internacional sobre el Cambio Climático" confirmó que inclusive considerando dicha merma, los niveles de temperatura están muy por encima de lo propuesto.
También en el "Panel de Control Internacional sobre el Cambio Climático" se tuvo en consideración, que dicho período produjo cambios en los ecosistemas que dejaron de estar atacadas por la contaminación diaria a la que es sometida por la humanidad, provocando fuertes cambios climáticos en todo el planeta.
Así se logró ver un proceso de “rebrote” en el ambiente natural, que alertó a las principales potencias mundiales a intervenir en los procesos de producción actuales.
Por ello, a inicios del 2021 se convocó a la mesa de negociación internacional promovida por la ONU, denominada COP26, la cual contó con la participación clave de los Estados Unidos.
En dicha conferencia, se planteó la necesidad de una transición verde para la producción con conciencia ambientalista, pero hoy a más de un año, ese proceso parece estar cada vez más lejos.
Durante el año pasado, el "Panel de Control Internacional sobre Cambio Climático" (IPCC) publicó un informe, donde daba cuenta de que la humanidad continuó calentando el planeta, pese a la cumbre de principios del 2021.
Además, se estima que en el futuro, la situación tienda a potenciarse en vez de reducirse, como se había propuesto en dicha conferencia.
Este calentamiento global trae aparejado cuestiones climáticas, como olas de calor o lluvias torrenciales, los cuales suelen derivar en sequías e incendios o inundaciones. Todos fenómenos que se ven asiduamente en los medios de comunicación de nuestro país.
Política e ideología
A las puertas de una nueva reunión mundial por el cambio climático, los ambientalistas ponen en duda la capacidad de los gobiernos en poder (o querer) hacerse cargo de la cuestión.
Claro está que la lucha que se libra, pone en veredas opuestas a los defensores del ecosistema y a los agentes del capital financiero dedicados a la producción en masa.
En ese sentido, Juan Esteche, nutricionista y vocero de la coordinadora argentina "Basta de Falsas Soluciones" (BFS) advirtió que la solución a la crisis climática, “posiblemente no salga de la próxima COP sino de las luchas que se vayan dando en los territorios”.
En tanto, agregó: “esto lo da vuelta una revolución de conciencia, si no se levantan los pueblos dudo que la dirigencia política actual esté a la altura de las circunstancias”.
No obstante, la realidad muestra que el cambio climático es cada vez más fuerte, más real e impacta directamente contra toda la humanidad.