Amalia, es la hija mayor del rey Guillermo Alejandro y de la reina Máxima Zorreguieta, y quien pronto asumirá el trono de los Países Bajos
La princesa Catalina Amalia de Orange, emitió declaraciones en torno al libro de su biografía, escrito por la actriz y comediante Claudia de Breij.
Durante las entrevistas, Amalia relató lo comprometida que se encuentra al servicio de su país, así como también; contó sobre sus atracciones y gustos que tiene, como cualquier otra persona.
“Estoy al servicio de mi tierra, entrego mi vida a los Países Bajos. Si consigo mejorar el mundo un poquito, me doy por satisfecha”.
Luego, ingresando a temas de política, hizo referencia a la libertad de expresión, afirmando que:
“No haré nada sin el visto bueno del Gobierno o el plácet de los ciudadanos… No podría firmar una ley contra la libertad de expresión. Va en contra de mi conciencia, y en el juramento como reyes se dice ‘que Dios me ayude’ y no es una frase vacía. Creo que puedo ayudar a mi país a resolver un problema por medio de la diplomacia”, expresó la Amalia.
Continuando con sus declaraciones, la joven princesa, hizo mención al tipo de relación que mantiene con Argentina, país de origen de su madre.
“Soy medio argentina y me gusta mucho el polo, aunque de todas formas tendría que aprender a jugarlo no?”, se pregunta risueña. Luego agregó, “Yo hablo bien el castellano con su acento porque tuve una niñera de allá. En la Argentina siempre hay música. Siempre hay alguien en la familia tocando algún instrumento o alguien cantando. Es un país genial aunque allí la prensa nos persigue un poco más”.
Ingresando al plano más personal, sabemos que Amalia cumplirá 18 años el 7 de diciembre; sin embargo, confesó que aún es fanática de las historias de princesas, de los caballos y de cantar; y que por esta razón, escucha a Beyoncé, su artista favorita.
De princesas y de tiaras…
¿Qué es una tiara?, se estarán preguntando más de uno. Una tiara es un tipo de corona que suelen utilizar las mujeres en sus peinados.
Ahora sí, podemos comprender que, a la joven que creció rodeada de coronas como princesa e hija de la realeza, le sobran motivos para que le gusten desde pequeña.
“De niña solía ponerme las tiaras de mi madre y también sus joyas”.
Es notorio que, su sabiduría y gusto por este accesorio tan característico de la realeza, es una de las cualidades en las que se destaca. “Amo las tiaras. Enséñame una y sabré de dónde viene. Puedo reconocer todas las tiaras de Europa”, admitió la princesa.