Esta tarde se llevó a cabo la final del Mundial de Clubes, donde se enfrentaba el Chelsea, campeón de la Champion League contra el Palmeiras, ganador de la Copa Libertadores.
Así fue que tanto Chelsea (Ing) como Palmeiras (Bra) salieron a la cancha para disputar el último partido del torneo.
Como es costumbre, el encuentro comenzó disputado, medido y sin mucha actividad de cara a gol.
En el primer tiempo, solo hubo una jugada que derivó en peligró para el Palmeiras, tras un disparo de Thiago Silva que el arquero supo desviar al corner.
Pero en complemento, finalmente se rompió el cero inicial gracias a Lukaku, quien no perdonó en el área y puso en ventaja al Chelsea.
Si bien el gol le dio una mayor tranquilidad, un error iba a volver a complicar las cosas.
En un centro al área inglesa, Thiago Silva saltó a defender y accidentalmente la terminó tomando con la mano.
Tras la intervención del VAR, el árbitro dio el penal en favor del Palmeiras y Veiga puso el 1 a 1 desde los 12 pasos.
Más allá de los 90
Con las tablas en el marcador, ambos equipos guardaron la compostura y mantuvieron el empate hasta el final.
Luego de los 90, llegó el tiempo suplementario antes de llegar a la definición por penales.
Pero a los 10’ del segundo tiempo, la pelota impactó en la mano de Luan y el árbitro con la ayuda del VAR volvió a dar un penal en favor de los ingleses.
El encargado de sentenciar fue Havertz quien no perdonó y consagró al Chelsea como el campeón del Mundial de Clubes.