River alcanzó la punta del torneo de Primera División al vencer 2 a 1 a Boca en el primer superclásico con público en las tribunas. Julián Álvarez marcó los dos goles del millonario y tuvo un altísimo rendimiento, por lo que se transformó en la figura del partido.
Ante, seguramente, más público del permitido, por lo que se podía divisar en las tribunas del Monumental, el fútbol volvió a sentirse de nuevo fútbol con el contexto festivo que disfrutaron los actores principales del encuentro.
El violento comienzo del derbi, con fricciones de un lado y otro, se cortó a los 16 minutos, cuando, en una serie de fuertes faltas cometidas a Braian Romero y otra a Palaveccino, Marcos Rojo vio la tarjeta amarilla en dos oportunidades y se ganó la roja con la invitación a salir de la cancha.
Desde ahí, se presentó otro partido y sin retorno para Boca. Sobre todo cuando el técnico, Sebastián Battaglia, decidió tapar el vacío con la entrada de Carlos Zambrano y la salida del creativo Edwin Cardona.
Fuente: (TNT Sports).
River dominó e inclinó la cancha a su favor con su incesante juego de ataque, pero sin fuerza colectiva para que realmente dañe la defensa xeneize. Finalmente, una talentosa jugada individual de Álvarez para sacarse a un defensor de encima y revolear un pelotazo, logró, de repente, complicar al arquero, Rossi, al que también pareció que el sol le jugó una mala pasada. 1 a 0 para el local.
La abrumadora superioridad que se desplegó en la cancha terminó de golpear al conjunto de Battaglia antes del cierre del primer tiempo, cuando, en una mala salida de Rossi desde el fondo, los millonarios armaron jugada a puro toque para que el delantero de la selección vuelva a marcar para cambiar la trayectoria al gol.
Boca desapareció en el segundo tiempo y River volvió a mostrar sus problemas para liquidar el pleito con ese bajo Carrascal que no terminaba de cerrar las jugadas y mostraba inestabilidad.
El descuento azul y oro con el cabezazo de Carlos Zambrano fue anecdótico. Al cierre del encuentro, culminó la tardenoche con una verdadera fiesta en el regreso de los hinchas, con canticos para el plantel y su entrenador.