Las ollas quemadas pueden convertirse en un verdadero desafío en la cocina, pero ¡no hay necesidad de rendirse! Con los métodos adecuados, podrás deshacerte de la suciedad incrustada y hacer que tus ollas vuelvan a lucir impecables con estos trucos de limpieza.
Los mejores trucos para eliminar quemaduras
Agua caliente y virulana: Llena la olla con agua caliente, déjala reposar 30 minutos y luego frótala con detergente y virulana. Ideal para quemaduras superficiales.
Vinagre blanco: Hierve una mezcla de agua con vinagre en la olla quemada. Deja enfriar y limpia fácilmente los residuos carbonizados.
Bicarbonato de sodio: Agrega bicarbonato al agua hirviendo y deja reposar. Luego, usa una esponja para remover la suciedad adherida.
Sal gruesa: Si no tienes bicarbonato, mezcla agua y sal sobre una esponja y frota el área quemada.
Refresco de cola: Vierte una botella en la olla y llévala a hervir. Deja reposar y, cuando enfríe, raspa con un repasador.
Consejos extra para mantener tus ollas impecables
Actúa rápido: Cuanto antes limpies la olla, más fácil será eliminar la suciedad acumulada.
Cocina a fuego lento: Usa ollas de tamaño adecuado para evitar que los alimentos se quemen.
Persevera: Si el truco no funciona a la primera, repite el proceso hasta lograr el resultado deseado.
¡Dale nueva vida a tus ollas con estos sencillos trucos!
Olvídate del desgaste y la suciedad incrustada, prueba estos métodos y disfruta de utensilios relucientes como el primer día.