Tener un jardín esplendoroso todo el año es más fácil de lo que piensas. Con unos cuidados básicos y un poco de atención, tu césped puede lucir saludable y vibrante.
Aquí te compartimos cinco recomendaciones que te ayudarán mejorar el césped del jardín sin gastar mucho tiempo ni dinero.
Qué césped debo sembrar
Para que tu césped luzca saludable todo el año, lo primero que debes considerar es qué tipo vas a plantar. ¡Elige sabiamente! Ten en cuenta el suelo, el clima y los usos que le darás. Si tu clima es frío, opta por riegrass, festuca o poa. Y si es cálido, lo mejor es bermuda, grama brasilera, kikuyo, zoysa o San Agustín. Estas opciones son perfectas para alto tránsito, crecen rápido y son invasivas. Además, toleran la sombra, la sequía y el salitre.
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Cómo podarlo
¡La poda es clave para un césped sano y sin malezas! Si dejas crecer demasiado el pasto, aparecerán manchones amarillos cuando lo cortes. Si lo cortas muy corto, incentivarás el crecimiento de maleza. La recomendación es cortarlo a unos 8 centímetros en climas frescos y a 5 centímetros en climas cálidos. No uses tijeras, ya que podrías arrancar la planta de raíz. Cambia de dirección al podar para evitar que el césped se compacte y limite su desarrollo.
Cómo y cuándo regarlo
Para que el césped esté verde, la tierra debe tener un mínimo de humedad. Riega en momentos de sequía, pocas veces a la semana. El horario ideal es a las 5 AM, así el pasto tiene tiempo de absorber el agua y el exceso se evapora al mediodía. Si riegas durante las horas de más calor, gastarás mucha agua y se evaporará antes de que la tierra la absorba. Si riegas a la noche, el agua sobrante puede favorecer la aparición de hongos y enfermedades.
Cómo fertilizar el césped
Para mantener el césped verde y sano, es aconsejable añadir nitrógeno. La forma más práctica de obtenerlo es no recogiendo las podas de césped. ¡Sí, así de fácil! Esas pequeñas hojas funcionan como abono cuando se degradan. Sin embargo, si el césped que cortaste tiene más de 3 centímetros, no lo uses, ya que tardará más en descomponerse y esto puede facilitar el exceso de humedad y la aparición de plagas y hongos.
Cómo es el drenaje
Si en tu césped hay manchones amarillos o lugares donde no crece y siempre está con barro, es porque hay problemas de drenaje. Tu jardín debe estar inclinado hacia un costado o en forma curva para que el agua drene hacia los lados y no se estanque en el medio. Así, evitarás que el pasto se rompa con facilidad y pueda desarrollarse de manera adecuada.