La yerba mate es una bebida tradicional de varios países sudamericanos, especialmente en Argentina, Uruguay y Paraguay. Está compuesto por hojas de la planta ilex paraguariensis Saint Hilaire, tostadas y desecadas. Se consumen en un recipiente de madera donde se coloca la yerba y se sorbe la infusión a través de una bombilla.
Por lo general, las personas que consumen yerba mate suelen hacerlo a diario, sin medir la cantidad exacta de consumo. Según estudios, es posible beber yerba mate todos los días, pero con moderación, es decir, entre 3 y 5 mates diarios.
Por ende, cada persona no puede exceder de los 15 a 30 gramos por día, ya que, una cantidad adicional puede generar efectos secundarios, como ansiedad, dolor de cabeza, problemas digestivos, aumento de la frecuencia cardiaca y presión arterial alta.
Además, puede ser perjudicial para aquellos que padecen de insomnio. Se recomienda no consumir yerba mate antes de ir a dormir, su efecto neuroestimulantes puede complicar el descanso y desvelar.
En aquellas personas susceptibles a problemas de gastritis, su consumo excesivo puede generar malestares gastrointestinales o distensión en el esfínter gastroesofágico.
Sin embargo, si la yerba mate se consume con moderación se obtienen diversos beneficios. Aquella infusión es un estimulante del sistema nervioso central que permite mejorar la función cognitiva, además, permite aumentar la producción de neurotransmisores como dopamina y serotonina que mejoran el estado anímico.