Miércoles 1 de Mayo 2024
PLANTA

Conocé la planta Strongylodon macrobotrys y sumala al paisaje de tu jardín

Strongylodon macrobotrys, una planta ideal para embarcarse en una aventura botánica.

Strongylodon macrobotrys. (Fuente: Instagram).
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Esta plantas trepadora perenne, oriunda de la exuberancia tropical filipina, es más conocida como la “parra de jade”. Sus flores turquesas, que pueden extenderse majestuosamente por más de dos metros, son una maravilla rara que hoy enfrenta la amenaza de la deforestación.

La Strongylodon macrobotrys es un espectáculo de la naturaleza con sus racimos colgantes de flores en forma de garra, que brotan de tallos retorcidos y hojas verdes brillantes. Imagina más de 80 flores por espiga, cada una con pétalos que se arquean grácilmente hacia el cielo. Sin dudas, una planta que no pasará desapercibida en tu jardín.

Strongylodon macrobotrys. (Fuente: Instagram).

Un arte delicado

Después de su deslumbrante floración en primavera o verano, una poda cuidadosa puede estimular el crecimiento de nuevas ramas. Para exhibir su esplendor, una pérgola o soporte alto es ideal, permitiendo que cada flor se muestre en todo su esplendor bajo la luz del sol, lejos del frío, en un clima cálido de al menos 15°C.

Strongylodon macrobotrys. (Fuente: Instagram).

El ciclo de la vida

La propagación de la parra de jade se hace a través de semillas frescas, que deben plantarse rápidamente debido a su corta viabilidad. En tan solo 10 a 15 días, estas semillas comienzan su viaje hacia la transformación en una planta floreciente.

Strongylodon macrobotrys. (Fuente: Instagram).

La base del éxito

Durante su crecimiento, la Strongylodon macrobotrys anhela agua en abundancia, pero con moderación para evitar el encharcamiento. Un sustrato neutro a ácido, rico en materia orgánica y bien drenado, es el entorno perfecto para que esta planta alcance su plenitud después de tres años.

Strongylodon macrobotrys. (Fuente: Instagram).

Con la Strongylodon macrobotrys, no solo cultivarás una planta, sino que también preservarás una de las maravillas más raras y preciosas del mundo vegetal. ¡Es un tesoro viviente que merece ser protegido y admirado!