La convivencia entre humanos y mascotas se ha repetido a través de los siglos, donde se han conseguido domesticar algunas especies de animales, siendo las más comunes los gatos o los perros. Es por ello que la ciencia decidió involucrarse en este campo y dar a conocer cuales son los beneficios de convivir con animales.
En ese sentido, el objetivo principal que persigue la ciencia es encontrar una relación entre la convivencia con las mascotas y las alergias alimentarias que se diagnostican en los bebes recién nacidos.
La elección de esta hipótesis surge a partir de los diagnósticos que se han dado al respecto. En los 10 países del mundo con mayores ingresos, uno de cada diez niños es diagnosticado con alguna alergia alimentaria, cifra que aumenta año a año.
Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), la leche, trigo, huevo, frutos secos, pescado, crustáceos y soja son los principales alimentos alérgenos.
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En base a estos datos, desde el Centro Regional de Fukushima para el Estudio del Medio Ambiente y la Infancia de Japón comandado por Hisao Okabe, buscaron llevar a cabo un experimento.
Para ello, comenzaron a estudiar a 66.215 niños durante el embarazo y la primera infancia con el objetivo de encontrar una posible relación entre la exposición a perros o animales de granja y la reducción de las alergias alimentarias.
Resultados
Luego de seguir de cerca los datos, los investigadores consiguieron expresar que el 22% de lo niños expuestos a mascotas (principalmente perros y gatos) desde el período fetal manifestó una incidencia significativamente menor de alergias alimentarias.
Por ejemplo, los niños que convivieron con perros arrojaron una muestra donde se revela ser menos propensos a padecer alergias a alimentos como huevo, leche y los frutos secos, mientras que los que estuvieron expuestos a los gatos, la disminución se vio reflejada en el huevo, el trigo y la soja.
No obstante, si bien los resultados conseguidos por la ciencia abren el campo para una investigación más profunda, lo cierto es aún es muy pronto para asegurar que la convivencia con perros, gatos y mascotas disminuya la aparición de alergias alimentarias.