El tahini, esa pasta suave y cremosa hecha de semillas de sésamo molidas, ha sido un secreto culinario bien guardado durante miles de años. Originario de la India hace 5000 años, la receta de tahini ha viajado a través de continentes y culturas, dejando su huella en las cocinas africanas, asiáticas y de Oriente Medio.
Hoy en día, es un ingrediente esencial en platos tan populares como el hummus y el baba ganush, y también se utiliza para hacer una gran variedad de salsas y aderezos para ensaladas. Pero, ¿alguna vez has considerado el tahini como el ingrediente estrella para realzar tus aperitivos?
En este artículo, exploraremos el rico legado del tahini y te mostraremos cómo puedes utilizar esta antigua receta para darle un toque exótico a tu próxima picada.
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Ingredientes
- 250 grs de semillas de sésamo
- Aceite de oliva
- Sal
Modo de preparación
- Coloca una sartén a fuego medio bajo y añade las semillas de sésamo, sin dejar de remover durante unos 2 a 3 minutos. Las semillas deben dorarse sin quemarse.
- Volcamos las semillas rehogadas y doradas en un bol y dejamos reposar por al menos 10 minutos. Luego incorporamos en una licuadora o procesadora y añadimos 2 cucharadas de aceite.
- Procesamos durante unos 30 o 40 segundos (este tiempo puede ser mayor dependiendo de la potencia de tu procesadora o licuadora).
- Removemos bien el contenido, añadimos 2 cucharadas más de aceite y volvemos a procesar, hasta que obtengamos una pasta cremosa. (Esto puede tomarte hasta unos 3 minutos).
- La pasamos a un recipiente y nuestra receta habrá quedado lista para dipear en tu próxima picada.