La aromaterapia es una herramienta medicinal que se basa en el tratamiento integral del organismo. Utiliza los canales olfativos para equilibrar nuestro cuerpo tanto por dentro como por fuera. Al igual que con el hogar, gracias a las plantas podemos equilibrar nuestra energía interior.
Esta práctica curativa emplea el aroma de las plantas para tratar el sistema psíquico, corporal e incluso emocional. En 1937, el químico y perfumista francés René-Mourice Gattefossé compartió una guía sobre el uso de la aromaterapia como práctica curativa en las antiguas civilizaciones, dándole nuevamente la importancia que tenía en Egipto, China y otras grandes culturas.
Desde entonces, la importancia de este tipo de tratamiento ha ido en aumento. Incluso, de manera inconsciente, practicamos la aromaterapia. Por ejemplo, cuando un aroma nos recuerda a nuestra infancia, estamos experimentando sus beneficios. Pero para que funcione correctamente, necesitamos determinados aromas.
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Existen plantas que actúan de forma muy efectiva en este tratamiento, y todas ellas son muy conocidas. ¡Te sorprenderás!
Sándalo
Muy utilizado para humificar el hogar. Su esencia se destila a partir de la corteza de árboles de sándalo de entre 40 y 80 años. Este aceite esencial es el más antiguo, con usos registrados desde hace más de 4000 años.
Lavanda
Su aroma evoca limpieza y pulcritud. Utilizada en Europa para lavar tejidos antes de la Revolución Industrial. Su aceite esencial es ideal como antiséptico y fungicida. En la antigüedad se usaba para tratar problemas digestivos, dolores de cabeza e incluso el estrés.
Eucalipto
Caracterizado por su fuerte, pero agradable aroma. En aromaterapia se utiliza para fortalecer el sistema inmune y tratar enfermedades respiratorias. Además, es un gran aliado para mejorar la concentración.
Si bien estas plantas son las más efectivas y conocidas en la aromaterapia, se pueden utilizar muchas otras como base para elaborar aceites esenciales terapéuticos.